A la luz el 'nuevo' patrimonio eclesiástico

La iglesia de Santa Maria y la rectoría de Llimiana, la iglesia de Sant Miquel de Vielha y la iglesia de Sant Andreu de Casau son tres de los 17 inmuebles que el obispado de Urgell habría inmatriculado (inscrito por primera vez una propiedad en el registro) en los últimos años aprovechando una modificación de la ley Hipotecaria y que ha suscitado polémica por su opacidad. El resto, 12 de un total de 17, se encuentran en el municipio de Montferrer i Castellbò y otros dos pertenecen a la capital de la Val d’Aran, según el programa Sense Ficció que se emitió ayer en TV3. El obispado de Urgell reconoció hace dos semanas que había puesto edificios a su nombre, como avanzó SEGRE. Sin embargo, ayer ni confirmó ni desmintió cuáles ni cuántas son.

Las otras dos diócesis leridanas, la de Lleida y la de Solsona, no han facilitado datos, aunque todo hace indicar que han hecho lo mismo que la de Urgell. El arzobispo, Joan Enric-Vives, aseguró e que “lo que era de la Iglesia, de las parroquias o de la diócesis de Urgell, ahora se ha inscrito. Y si en algún lugar concreto hubiese habido algún error, se podría enmendar”. También añadió que “no se ha quitado nada a nadie”.

El arzobispo de Urgell afirmó en una carta dominical que “no se ha quitado nada a nadie”

El alcalde de Vielha, Juan Antonio Serrano, afirmó que “hace tiempo que se hizo una regulación de iglesias y creo recordar que dos de ellas eran la de Sant Miquel y la de Casau”. Por su parte, el alcalde de Llimiana, Josep Terré, afirmó que documentalmente no tenía constancia pero “damos por supuesto que el obispado es el propietario. Hace una década, diócesis y ayuntamiento acordaron la cesión de la rectoría al municipio por un plazo de 40 años”. También añadió que, para la última reforma del templo, el consistorio aportó 2.400 euros y el obispado 2.400 más y la parroquia, unos 10.000. La diócesis de Urgell dijo que se han inmatriculado los inmuebles que “de los que poseíamos su título y no estaban registrados” y que no han recibido ninguna queja. El obispado de Lleida no se manifestó respecto a esta cuestión y el del Solsona afirmó que la relación de inmuebles se había enviado a la Conferencia Episcopal Tarraconense que, a su vez, declinó informar de ello y añadió que la voluntad de hacer pública la información corresponde a las propias diócesis.

¿Bienes de dominio público o de propiedad privada? Una modificación de la ley Hipotecaria permitió a la Iglesia, entre 1998 y hasta 2015, inscribir a su nombre bienes de carácter inmemorial. La propia Conferencia Episcopal Española afirmó que podían ser 40.000 inmuebles, después de que se dijera que el Gobierno preparaba un listado y que podría reclamar parte de ellos (unos 3.000) al considerar que se trata de “bienes de dominio público”. Además, algunas de las inmatriculaciones se habrían hecho en fincas privadas, como el caso de ermitas.