BIENESTAR MOVILIZACIÓN
Movilización en Lleida para salvar los centros de trabajo de discapacitados
Un millar de personas exigen más financiación pública tras 10 años “congelados”
Las entidades de atención a personas con discapacidad en Lleida se movilizaron ayer ante la delegación del Govern para exigir más financiación y poder afrontar el aumento del salario mínimo interprofesional en los Centros Especiales de Trabajo. El incremento, junto a las ayudas congeladas, ponen en riesgo 650 puestos de trabajo en la provincia.
Ni la lluvia ni el frío. Nada pudo frenar ayer que un millar de personas, usuarios y trabajadores de entidades que atienden a personas con discapacidad de Ponent, unieran sus voces para reclamar más financiación y poder salvar los once Centros Especiales de Trabajo (CETs) que hay en la provincia. Una multitudinaria concentración ante la delegación del Govern en Lleida convocada por la Federació Allem, que agrupa a 17 entidades, para denunciar que están en peligro 650 puestos de trabajo de personas con especial dificultad ante la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) y la congelación de las ayudas públicas. Bajo lemas como “No nos olvidéis”, “Queremos trabajar” o “Salvemos los CETs”, denunciaron que arrastran una situación “insostenible” desde hace 10 años con recortes y financiación congelada., lo que afecta a más de 2.300 usuarios y más de 1.500 profesionales en la provincia. Al respecto, Jordi Morillas, gerente de Acudam y portavoz de Allem, recordó que los CETs tienen “una función social muy importante”, ya que proporcionan “trabajo y salario digno” a personas que no serían contratadas por empresas ordinarias. Según Morillas, el Gobierno central ha aprobado un incremento del 22% del salario mínimo, lo que calificó de “extraordinario”, pero que pone en riesgo la competitividad y estabilidad de estos centros al no poder asumirlo sin ayuda. De hecho, las entidades no están aplicando el incremento del SMI, que ahora es de 900 euros. En el caso de Lleida, tiene un impacto de 1,5 millones de euros, por lo que piden al Estado que se comprometa a pagar la mitad de este incremento y que la Generalitat aporte el 25% restante. “No nos pueden dejar olvidados ni congelados”, reclamó Morillas. Las entidades leridanas se sumaron así a las movilizaciones convocadas en toda Catalunya para alertar de que están “en la cuerda floja”.
Entidades ven “insuficiente” los 7,5 millones anunciados por el Govern Maria Teresa Bresco fue una de las personas que participó ayer en la lectura del manifiesto de las entidades de discapacidad. Bresco explicó que su hijo es usuario de Aspros, en Sudanell, y que por su trabajo recibe un suelo que “le hace sentirse útil”. “Él no conoce el valor del dinero, pero le ilusiona llegar a casa y poder darme los cuatro euros que le dan cada semana. ¿Qué pasará si las entidades no pueden mantener estos puestos de trabajo?”, lamentó esta madre. Presco calificó de “injusto” que su hijo pueda perder este salario. “Esta situación causa inseguridad entre las familias”, afirmó. Por su parte, Teresa Alès, usuaria del CET de la Associació Alba de Tàrrega, aseguró que su trabajo le ha permitido “libertad y autonomía” y mostró su preocupación porque la subida de los costes se repercuta en los precios de los productos. “Si es así, los clientes se irán”, dijo.