TRADICIONES CELEBRACIONES
Alpicat reparte 400 raciones en la Matança del Porc
La Associació Cultural del Dones d’Alpicat y el ayuntamiento organizaron ayer una nueva edición de la Festa de la Matança del Porc que contó con la colaboración de un buen número de voluntarios. La celebración volvió a cumplir con la tradición que la señala como una de las fiestas más emblemáticas del municipio y, de nuevo, repartió más de 400 raciones de productos derivados del cerdo y de la gran “cassola” que se cocinó en la población entre las vecinas y vecinos de Alpicat.
El tiempo acompañó durante toda la jornada y los trabajos para preparar las “cassoles” y cocinar la “llonganiça” se iniciaron desde primera hora de la mañana en el Parc del Graó, en el centro del pueblo. Los cocineros elaboraron la gran “cassola” utilizando las mismas técnicas que se usaban antiguamente. Antaño, la matanza se llevaba a cabo en invierno en las casas de payés para poder tener productos con los que alimentar a la familia durante todo el año.
Fueron los propios vecinos los que llevaron los enseres para poder disfrutar la jornada lúdica y gastronómica en el parque y muchas personas ocuparon el Parc del Graó aprovechando la buena temperatura del día. Otros, por el contrario, prefirieron llevarse las raciones que les correspondían a sus casas para degustarlas en sus hogares.
La Festa de la Matança del Porc quiere ser una celebración en la que los vecinos puedan reunirse y celebrar las tradiciones con el fin de mantenerlas y pasarlas de generación en generación, algo que se está consiguiendo, según indicaron fuentes municipales. La fiesta congrega alrededor de las “cassoles” a la mayoría de las personas que viven en la población, muchas de ellas como voluntarias para preparar desde primeras horas de la mañana la comida que degustarán cientos de vecinos. La celebración fue todo un éxito ya que tuvo un seguimiento masivo y casi todos pudieron degustar los platos preparados.