Multitudinario 'preludio' de Sant Jordi

La calle Major de Lleida se vistió ayer de Sant Jordi. Solo faltaron las rosas. El Día Internacional del Libro coincide este año con la campaña electoral y justo después del lunes de Pascua, por lo que libreros y editores ingenian fórmulas para no perder ventas. De hecho, el Gremi de Llibreters vaticina que incluso se podría incrementar un 2% el negocio gracias a iniciativas como la que acogió ayer la librería Caselles de Lleida: una firma de libros multitudinaria que contó con la participación de autores como Maria Barbal Marc Artigau, Sílvia Soler, Rafel Nadal y Gerard Quintana.

La pallaresa Maria Barbal acaba de publicar A l’amic escocès (Columna). Barbal se mostró muy contenta de regresar a Lleida y establecer contacto con sus lectores, “aunque siempre me cuesta hablar de mis libros”, aseguró. A l’amic escocès está basada en una historia real protagonizada por dos soldados, un escocés y un pallarés, que coinciden en un hospital de campaña durante la Guerra Civil y se hacen amigos. Josep Artigau llega a la cita de Sant Jordi con La vigília (Destino), premio Josep Pla. Artigau también jugaba en casa, ya que su familia es originaria de Arbeca. La vigília explica la historia de un escritor de cuentos que trabaja en la radio y recibe el encargo de una señora rica que quiere que le escriba su biografía. Este escritor tiene un hermano mayor que de niño se perdió en el bosque “y nunca volvió a ser el mismo”. Un puzle que se completa con cuentos y que acaba encajando.

Gerard Quintana será uno de los previsibles best-sellers de la Diada de Sant Jordi con su debut literario, El cel i la terra (Columna). El cantante de Sopa de Cabra ha escrito “una historia de amor que no es romántica, en la que el contexto histórico es importante pero no es histórica, y que tiene banda sonora sin ser musical”.

Sílvia Soler reúne a tres hermanos en crisis en la casa en la que se criaron en El fibló (Columna). Su madre falleció por la picadura de una abeja y crecieron con un padre que no les hacía caso porque estaba consagrado a la literatura. Una patum a la que llora todo el país cuando muere menos sus tres hijos.

Rafel Nadal recrea en El fill de l’italià (Columna), premio Ramon Llull, la doble odisea de mil marineros italianos refugiados en Caldes de Malavella en 1944 y la de un vecino del pueblo que busca sus orígenes setenta años después.