TRADICIONES FESTEJOS
Festa Major al compás de l'Eixida
La consellera de Cultura, Mariàngela Vilallonga, preside los actos más sentidos de las fiestas de Tàrrega|| Las calles del centro histórico se llenan durante la procesión de les Santes Espines
La Festa Major de Tàrrega celebró ayer sus actos de mayor arraigo popular y en honor a los patrones de la ciudad, les Santes Espines y la Mare de Déu de l’Alba. Las actividades empezaron con el cortejo de les Santes Espines, solemne procesión de cultura popular encabezada por las reliquias. En el séptimo año de la recuperación de esta tradicón del siglo XVI ejerció de invitada de honor la consellera de Cultura, Mariàngela Vilallonga, que destacó que “participar de la cultura popular es tan importante como colaborar con las bibliotecas y los museos de arte de Catalunya, todo favorece la cohesión social”. En este sentido, Vilallonga destacó el apoyo del gobierno de la Generalitat “hacía todas las manifestaciones culturales de nuestro país, que es riquísimo”. En cuanto al inminente juicio por las 111 obras del Museu de Lleida originarias de la Franja, la consellera de Cultura no quiso hacer declaraciones. Por su parte, la alcaldesa de Tàrrega, Rosa Maria Perelló, dijo que la jornada “combina la tradición y la cultura y sirve para honorar a los patrones de la ciudad”. La procesión por las calles del centro histórico contó con la participación de las entidades de cultura popular locales, entre las que había el nuevo elemento del bestiario local, la Targafera de los Targalets. El pasacalles acabó en la renovada plaza Major donde tuvo lugar el momento más emblemático y esperado cuando el relicario de les Santes Espines fue sumergido en agua al pie de la cruz de término para invocar la lluvia, según manda la tradición. El encargado del ritual fue el obispo de Solsona, Xavier Novell. Seguidamente, les Santes Espines entraron de nuevo en la iglesia de Santa Maria de l’Alba, donde se ofició la misa en honor a las reliquias. Al terminar, la plaza Major acogió el baile de L’Àliga de la mano de Guixanet. Seguidamente, tuvo lugar la escenificación del Ball de l’Eixida, la danza popular de Tàrrega que, como marca el protocolo, abrió la alcaldesa con su marido a los que se les sumaron el resto de autoridades y la ciudadanía. Después se sucedieron los bailes del resto de entidades de cultura popular la ciudad.
La Festa Major de Tàrrega acaba hoy, día de Santa Maria de l’Alba, con una misa oficiada por el obispo de Solsona. La plaza de les Nacions también acogerá un vermut, conciertos y baile con de la Orquestra de Vent de l’Escola de Música de Tàrrega al mediodía y la Orquestra Banda Sonora por la tarde.