Víctor, María y Lluís: «Queremos que el niño crezca con esta fiesta»

Víctor Boldú, un niño de tan solo un año de edad, lleva el Aplec en las venas. “Si llega a nacer unos días antes, hubiese ido a la edición del año pasado con tan solo unos días de vida”, explica sus padre, Lluís y María. “Para nosotros es importante que el niño empiece a empaparse desde una pronta edad de una de las tradiciones más bonitas e importantes de nuestra ciudad”, aseguran. Con cerca de un centenar de pequeños inscritos, Bacus es una de las peñas más familiares. “Creemos que es una manera de que los niños hagan amigos y vivan experiencias que de otro modo no podrían. Eso sí, hay unas normas. No pueden estar detrás de la barra, siempre van identificados y además tenemos una zona infantil. Y por la noche, para casa”, aseguraron. En lo referente al relevo generacional, afirmó que está completamente cubierto. “Vamos a tener Aplec durante muchos años más”.

Especial Aplec 2019