ENTIDADES SOLIDARIDAD
Aumentan las personas sin hogar
La fundación Arrels Sant Ignasi atendió a 1.560 usuarios el año pasado, 165 más que en 2017, de los que el 41% eran mujeres || Alerta ante el repunte de jóvenes sin red familiar
La fundación Arrels Sant Ignasi alertó ayer de que entre los perfiles de usuarios que atendió el año pasado han aumentado los de jóvenes sin hogar y sin problemas con las drogas. “Todavía no son un gran número, pero estamos detectando indicios que debemos cortar de raíz”, explicó el adjunto de dirección de la entidad, Òscar Costa, durante la presentación de la memoria de 2018 de la fundación. Asimismo, también destacó que del total de las 1.560 personas atendidas el año pasado (165 más que en 2017), el 41% son mujeres, una cifra que se mantiene con los años. “Las mujeres que pasaron por Arrels presentaban un perfil más deteriorado a causa de las adicciones a las drogas y al alcohol y, en algunos casos, habían decidido prostituirse para obtener los ingresos suficientes para pagar sus adicciones y el cuidado de su familia”, relató Costa. Otro usuario tipo fue el de una persona con problemas psiquiátricos no diagnosticados o sin seguimiento que, debido a su dolencia, dificultan la labor de acompañamiento de la entidad. Sin embargo el perfil mayoritario con el que la fundación solidaria se encontró durante el año pasado es del de personas sin problemas de adicción, que se encuentran “relativamente” dentro del sistema pero son parados sin prestación, o con prestaciones muy bajas, viven en casas inseguras y carecen de de ayuda ya sea familiar o de las instituciones lo que les lleva a una situación de exclusión. “De las 1.560 personas atendidas, 1.130 no recibían ningún ingreso, 809 estaban en situación sin hogar y 215 no tenían un techo bajo el que dormir”, afirmaron desde la fundación. Dentro de los distintos programas que Arrels Sant Ignasi desarrolla, en 2018 un total de 3.537 personas se beneficiaron de su servicio de alimentos, 309 fueron acogidas en su centro abierto, repartieron más de 9.400 jeringuillas y 6 personas han conseguido tener un piso de alquiler propio gracias a sus programas de reinserción y acompañamiento que, a su vez, atendieron a 15 y 78 usuarios respectivamente.
Tras analizar los datos, Arrels Sant Ignasi se propone de cara a este año tres retos. El primero: aumentar el trabajo en red para garantizar una vivienda digna a sus usuarios; el segundo, solucionar la problemática que presentan los usuarios con problemas mentales para poder proporcionarles un acompañamiento de mayor calidad; y el tercero, prevenir, erradicar y dar una respuesta a los jóvenes que se encuentran en situación sin hogar para no cronificar su situación. Finalmente la fundación reclamó a las administraciones coordinación y facilidades administrativas para que sus usuarios accedan a una vivienda social. La entidad cuenta actualmente con 166 voluntarios.