CELEBRACIONES 32 PUJADA AL PORT DE SALAU
Clamor por el occitano en Salau
Los participantes en la 32 subida al puerto fronterizo denuncian que Francia ha retirado las subvenciones para esta lengua || La organización alerta de la posibilidad de perder una cultura
Como cada primer domingo de agosto y desde hace 32 años, unas 500 personas celebraron ayer el tradicional encuentro occitano-catalán en el puerto de Salau, en el Pallars Sobirà. Un encuentro festivo a más de 2.000 metros de altitud que este año reivindicó más que nunca la lengua occitana, después de que el gobierno francés haya retirado las subvenciones para enseñarla en escuelas e institutos. Hacía más de veinte años que se subvencionaba el aprendizaje del occitano en Francia y este año los jóvenes ya no la podrán estudiar. Si no se revierte esta decisión, “en unos años el occitano morirá”, porque cuando no queda nadie que hable una lengua, ésta se pierde y “cuando una lengua desaparece, lo hace también su historia, su cultura y su recuerdo”, lamentó Núria Comas, del Círculo de Hermandad Occitano Catalán (CAOC). La subida al puerto de Salau la organiza esta entidad y es un clásico del primer domingo de agosto que va ganando participantes. La falta de comunicaciones hace que sea obligado subir a pie a la cima del puerto desde los dos lados. Desde la parte catalana el recorrido se inicia en el refugio del Fornet, en Alòs d’Isil (Pallars Sobirà) y desde la vertiente del Ariège, pasando por el pueblo de Salau, suben los occitanos. Los catalanes pueden llegar por una pista forestal, apta para vehículos todoterreno, hasta unos 45 minutos a pie antes del puerto. Los occitanos, en cambio, tienen más de dos horas y media de camino a pie por su lado, con un desnivel de más de mil metros. Una vez arriba, autoridades de la zona hacen sus parlamentos, los participantes comparten queso occitano y vino catalán y la fiesta termina con música y danzas tradicionales.
Los organizadores rememoran así las relaciones de amistad, culturales o comerciales que a lo largo de la historia ha habido entre los valles pirenaicos catalanes y occitanos, y que por cuestiones políticas quedaron truncadas. Núria Comas recordó que el puerto de Salau fue un lugar determinante en las comunicaciones entre las dos vertientes del Pirineo hasta bien entrado el siglo XX y que incluso había aduana en Alòs d’Isil. El objetivo es hacer el hermanamiento entre Catalunya y Occitania, que histórica y culturalmente han estado siempre muy unidas.
Más pasos fronterizos entre Lleida y Francia La creación de nuevos pasos transfronterizos entre Lleida y Francia no está actualmente en los planes del Estado ni del Govern. La demanda se remonta a más de 30 años atrás para abrir nuevas puertas hacia Europa, como el Túnel de Salau o la necesidad de mejorar el Eix Pirinec, que siguen a la espera de inversiones para impulsarlos.