Un precoz artesano de ‘gegants’

Pau Reig es un joven de Solsona que, con apenas 22 años, se ha convertido en un artesano de gegants y bestiario popular más importantes. Su útima obra ha sido Voliac, el murciélago del grupo de los diablos de Oliana. La figura se suma a otras conocidas como el Au Fénix y la serpiente Espedrera de Solsona. También ha hecho creaciones para Berga y pronto se sumará Tàrrega. Su sueño, asegura, es acabar esculpiendo figuras por toda Catalunya.

El leridano creció construyendo capgrossos con su hermano. Con el paso del tiempo, sus figuras fueron ganando también altura ya los 17 le llegó el que para él es uno delos encargos del que se siente más orgulloso: el Au Fénix para Solsona. “El momento del estreno es indescriptible porque sabes que pasará a formar parte de la cultura popular”, afirma el artista.

El leridano está terminando sus estudios de Bellas Artes y el Grado de Conservación de la UAB

Este 2019 ha sido importante para el joven porque se han estrenado varias de sus obras como la serpiente Espedrera del Carnaval de Solsona y el murciélago Voliac, en Oliana. Y los encargos siguen, ahora desde Tàrrega. “Me gusta que un pueblo tenga una pieza mía, lugares donde yo de pequeño iba a ver los gegants y alucinaba”, explica. A Pau Reig le encanta “ver a un niño admira alguna de mis creaciones”.

El joven no se atreve aún a calificar lo que hace como “profesión” y habla de encargos. El vecino de Solsona está terminando sus estudios de Bellas Artes y el grado de Restauración y Conservación en la Universitat Autònoma de Barcelona. Asimismo tiene un trabajo, por lo que las figuras las hace en su tiempo libre. Así, por ejemplo, trabajó noches enteras en Voliac. “Es un trabajo largo, de semanas y meses si lo quieres hacer bien”. Tardó cuatro meses en acabarlo y, para hacer un gegant, el trabajo se puede alargar unos tres meses.

Por otra parte, Pau Reig junto a su hermano, también comercializa pequeñas reproducciones de figuras de la imaginería catalana como los gegants de Cardona y Manresa o las figuras de la Patum. Todas estas reproducciones se venden por internet y en varias tiendas.