'Refugiadas' por una custodia

Un conflicto judicial con una niña de por medio. Es lo que está viviendo en los últimos días una menor de 7 años que vive con su madre pero que una jueza de Vielha ha resuelto dar su custodia al padre, que reside en la capital de la Val d’Aran. La niña y su madre llevan cuatro días encerradas en el consulado de Uruguay (país de origen de la progenitora) en Barcelona, después de que el pasado viernes el cónsul se negara a hacer la entrega de la niña al padre alegando que no tiene competencias, como ya informó SEGRE. Ahora, la jueza de Vielha ha ordenado a los Mossos d’Esquadra que custodien el edificio diplomático para que, en caso que la madre abandone el consulado, hagan efectiva la sentencia y entreguen la niña al padre. De esta forma, se anula la cita de mañana para hacer el intercambio en otro punto de encuentro. En un auto dictado ayer, la jueza señaló que fijó el consulado para hacer la entrega de la niña al considerar que el cónsul era una persona de confianza tanto para la menor como para su madre, pero que la negativa del diplomático paralizó el proceso. Ahora, obliga a los Mossos a intervenir, pero solo podrán hacerlo si la mujer abandona el consulado.

La jueza basa su decisión, a petición de la Fiscalía, en que se ha producido “una insostenible situación de tensión que está soportando la menor” y que, esta, añade “no puede alargarse más en el tiempo”. Madre e hija continuaban ayer en el consulado, con la compañía de una tía de la menor y de los trabajadores de la oficina diplomática. Por su parte, el ministerio de Asuntos Exteriores de Uruguay señaló que su embajador en España se puso en contacto con los ministerios de Exteriores y Justicia españoles, mientras que abogados de Barcelona mostraron su “preocupación” por el estado de la niña y pidieron que se respeten las decisiones judiciales.

Nueva movilización en Lleida para exigir medidas contra la violencia machista Decenas de personas volvieron a salir a la calle ayer en Lleida movilizadas por Marea Lila para unirse a la Emergencia Feminista decretada el pasado 20 de septiembre por varias entidades ante la violencia machista. La concentración se inició en la plaza dels Fanalets de Sant Jaume, con la lectura de un manifiesto, en la que se denunció el incremento de las mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas así como las agresiones sexuales, que se han disparado en el conjunto del Estado. Por ello, pidieron aplicar el Pacto de Estado contra la violencia de género, mayor dotación presupuestaria para poder hacer efectivas estas medidas y fomentar la educación en igualdad desde la infancia.