GALARDONES CIENCIA
Nobel de Química para los padres de la batería de litio
El Nobel de Química premió ayer el desarrollo de la batería de iones de litio, usada en teléfonos móviles, ordenadores portátiles o vehículos eléctricos, y que ha dado acceso a una revolución tecnológica. El alemán John B. Goodenough, el británico Stanley Whittingham y el japonés Akira Yoshino sentaron las bases de una sociedad “inalámbrica y libre de combustibles fósiles”, destacó la Real Academia de las Ciencias sueca.
Con las baterías de iones de litio “hemos tenido acceso a una revolución tecnológica”, aseguró desde la Real Academia de Ciencias Sueca Sara Snogerup Linse. El Nobel reconoce así un invento que más de media humanidad lleva en el bolsillo o tiene en su casa y que Olof Ramströn, también de la Academia de Ciencias, calificó de “brillante”. “Podemos ver un efecto enorme y sustancial en la sociedad gracias a esta batería”, agregó Ramströn, quien destacó su capacidad de recargarse a partir de fuentes limpias como la solar o la eólica. Los nuevos nobel realizaron “importantes descubrimientos” y fueron los que dieron lugar a la actual batería de iones de litio, que “en cierto sentido ha servido para hacer el mundo recargable”.Wittingham construyó la primera batería de litio funcional a principios de la década de 1970, aprovechando el impulso de ese elemento químico para liberar su electrón exterior; y Goodenough dobló su potencial aumentando la potencia y utilidad. Yoshino hizo la batería viable en la práctica eliminando el litio puro para sustituirlo por iones de litio, más seguros. El origen de este tipo de baterías coincide con la crisis petrolera de los setenta, que despertó el interés de las grandes compañías en invertir en nuevas tecnologías no basadas en combustibles fósiles. Los investigadores se dividirán los 9 millones de coronas suecas (912.000 euros) del premio.
La ronda de ganadores de los Nobel continuará hoy con uno de los más esperados, el de Literatura, que se fallará por partida doble: un premio para 2018 y otro para 2019, porque el del año pasado se aplazó por el escándalo sexual en el que estaba involucrada una persona afín a la Academia Sueca.