Reescribiendo la historia con nombre y apellidos

Las pruebas de ADN llevadas a cabo en los cuerpos localizados en la fosa común de El Soleràs, la más grande exhumada hasta la fecha en Catalunya con 141 soldados que combatieron en ambos bandos durante la Guerra Civil, han permitido poner nombre y apellidos a una nueva víctima. Se trata de Tomàs Verdaguer Roqué, la séptima persona identificada en la fosa de esta localidad de Les Garrigues. La directora de Memorial Democràtic, Gemma Domènech, entregó ayer a los familiares los restos de este soldado republicano originario de Sant Joan de les Abadesses, en el Ripollès. “Mi abuelo era un payés, no era un hombre con un gran interés por la política. Fue al frente porque le tocó”, explicó su nieto, Xavier Verdaguer, que asistió al acto de entrega junto a su hermana Rosa. Tomàs Verdaguer luchó en el frente del Segre y a finales de 1938 fue trasladado a uno de los hospitales de sangre instalado en El Soleràs después de recibir un disparo en el cráneo, aunque no sobrevivió y fue enterrado en la gran fosa común ubicada en el antiguo cementerio. Murió a los 34 años y la familia sabía que había sido enterrado en esta localidad porque tenían un certificado de defunción, pero no fue hasta hace 10 años cuando decidieron empezar a buscarlo. “Era un recuerdo doloroso para mi padre y en casa no se hablaba del tema”, apuntó Xavier Verdaguer, mientras destacó que “somos afortunados porque ahora tenemos lo que otros todavía buscan”. Actualmente, el programa de identificación genética de Memorial Democràtic ha registrado 8 positivos. La iniciativa compara el ADN de los restos localizados con las muestras aportadas por los familiares directos de los desaparecidos.