Las mujeres invierten el doble de horas en las tareas del hogar

Las mujeres siguen invirtiendo el doble de horas en las tareas del hogar. Así se desprende de una encuesta del Centre d’Estudis d’Opinió (CEO) sobre cuestiones de género en la que han participado ochenta leridanos −1.500 personas en toda Catalunya−, que demuestra que las mujeres destinan una media de 22,49 horas semanales a cocinar, planchar, hacer la compra y cuidar a los hijos o personas dependientes, mientras que los hombres dedican unas doce horas a estos quehaceres. En este sentido, las tareas donde se observa una mayor desigualdad son las relativas a la limpieza, pues solo un 12% de los hombres catalanes reconoce encargarse de la colada sin sus parejas, porcentaje que alcanza el 75% para ellas. Lo mismo ocurre con la limpieza del hogar, trabajo que solo un 9,6% de los hombres asegura tener asignado. También revela diferencias en la cocina, aunque en menor medida, pues un 23% de los hombres prepara las comidas, cifra que se duplica en el caso de las mujeres (69%). En cuanto a la conciliación laboral y familiar, la mitad de las mujeres afirma que ha faltado al trabajo por enfermedad de un hijo/a o de otro familiar, un porcentaje que cae al 14% en los hombres. Y es que, según los resultados de la encuesta, tras tener hijos o una persona dependiente a cargo el 78,6% de hombres asegura que “no le ha supuesto ningún cambio” en el ámbito laboral. Un 45% de las mujeres coincidieron en esta última respuesta, mientras que otras aseguraron que la maternidad les supuso reducir la actividad laboral (21,8%), interrumpir el trabajo más de 4 meses (19,3%) o limitar sus oportunidades de lograr un ascenso (12,3%). En cuanto a los factores más importantes para elegir un empleo, el primero es el salario en ambos casos, y el segundo para los hombres son las condiciones laborales, mientras que las mujeres priorizan que sea compatible con las responsabilidades familiares. Preguntados por si consideran que la situación de las mujeres en Catalunya es mejor, igual o peor que las de los hombres en relación al salario, ambos coinciden en que es peor. Asimismo, casi tres de cada diez catalanes afirman conocer a una mujer de su entorno familiar o círculo de amistades que ha sufrido una agresión sexual. En una escala del 0 al 10, la media de las mujeres sitúa en 5,59 el miedo que tienen a caminar solas de noche por temor a sufrir una agresión sexual.