“La prevención es la clave para que no entre el virus”

La prevención ha sido uno de los elementos clave para la asociación Acudam de Mollerussa para evitar la entrada, al menos por ahora, del coronavirus en su centro. La entidad, dedicada a la atención a las persones con discapacidad intelectual, optó por iniciar el confinamiento una semana antes de que lo decretara el Estado. De esta manera, se paralizó la actividad del centro de trabajo y del servicio de terapia ocupacional. Esto obligó a multiplicar las tareas en la Llar-Residència, en la que viven personas con discapacidades y donde la entidad trabaja para potenciar su autonomía y desarrollo personal, y en la residencia para personas de la tercera edad o que necesitan un mayor apoyo. Ambos equipamientos cuentan con unos 120 usuarios, aproximadamente.

Así, se aplicó un confinamiento severo de todos sus usuarios, a los que se les empezó a tomar la temperatura a diario. También es obligatorio el uso de mascarillas para salir, el lavado de manos e incluso aplicar desinfectante en los zapatos para los profesionales que deben salir del centro. “Cualquier medida es poca”, remarcó el gerente de Acudam, Jordi Morillas. Por ahora, los tests que se han llevado a cabo han dado todos negativo.

Morillas también remarcó la importancia de poder hacer pruebas rápidas y del protocolo a seguir: “Es imprescindible que la conselleria de Salud indique de forma fehaciente qué tipos de test podemos utilizar”. En este sentido, denunció “precios abusivos” de tests que varios laboratorios privados les han ofrecido. “Nos han pedido desde 120 a 190 euros para hacer la misma prueba”, remarcó. “Lo que pedimos desde las entidades es que las administraciones indiquen de forma clara qué tests se pueden hacer, de qué marcas y también que se haga un control de los precios”. Esta misma situación también se produce con las mascarillas. Morillas aseguró “la administración nos prometió que nos haría llegar material, pero la verdad es que llega en cuentagotas, y esto no se acaba de entender”.

A nivel profesional, se han tenido que ajustar los turnos y trabajadores del centro ocupacional y el Centro de Trabajo. Estos han sido derivados a las residencias, donde se ha multiplicado el trabajo. También se han habilitado turnos de retén por si alguno de los profesionales da positivo en coronavirus. A pesar de todo, la asociación también constata falta de personal, teniendo en cuenta que un 10% de la plantilla está de baja al tener patologías previas que los hacen vulnerables al Covid-19. “Todas las manos son ahora necesarias”, remarcó Morillas.

La plantilla también lleva a cabo un seguimiento de las personas con discapacidad intelectual que son usuarias de Acudam y están confinadas en sus casas, con el objetivo de asegurarse de que están bien de salud y poder atender las dificultades que puedan surgir.Los usuarios de las residencias han dejado de salir, pero la actividad se mantiene en el interior. Así, se han multiplicado y diversificado las actividades que sustituyen las visitas a la piscina o al pabellón, con el objetivo de que estén en buena forma. También mantienen contacto con sus familiares y amigos, a través de videoconferencia. “No solo hemos tenido que añadir más tecnología, sino también más creatividad. Todo esto no sería posible si el esfuerzo y dedicación de todos los profesionales de Acudam en estos tiempos de tanta incertidumbre y confusión”, remarcó. La entidad sigue avanzándose a las situaciones y ya está planificando los futuros protocoles del desconfinamiento. “Los test rápidos serán esenciales”, remarcó el gerente.