Moncloa impone a las comunidades su método de recuento de fallecidos

El ministerio de Sanidad ordenó ayer a las comunidades autónomas que solamente incluyan en las estadísticas de fallecidos por coronavirus a las personas que, antes de perder la vida, habían dado positivo en las pruebas PCR o en los test de anticuerpos. Igualmente, instó a que den cuenta de los casos asintomáticos y del número de sanitarios afectados.

Estas matizaciones en los criterios estadísticos marcados por el Gobierno central llegaron horas después de que la Generalitat empezara a incluir en el balance de muertos por la pandemia a los fallecidos fuera de centros hospitalarios. Al hilo de esto, la ministra de Política Territorial, Carolina Darias, subrayó que es necesario “un mismo método” en todo el Estado para computar “con éxito” los decesos y defendió el del Ejecutivo central, “marcado por la OMS”. En la misma línea, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, reafirmó la “credibilidad” de los datos de positivos y fallecidos que ofrece La Moncloa y explicó que el cambio de criterio en la recogida de datos es para afrontar “la fase de transición”. “No se trata de la calidad de la información, sino de tener más detalle”, apuntó. Asimismo, dijo que ya dispone de las cifras de muertos en las residencias en la pandemia, y que las publicará “en breve”. Por otro lado, indicó que ha habido “incoherencias” en la estadística de la Generalitat, y que por ello las cifras facilitadas ayer por el Estado no cuadran con el jueves. España sumó ayer 5.252 nuevos casos, 188.068 en total, y han muerto 19.478 personas, 585 más.

En respuesta a las nuevas directrices de Madrid, la consellera de Salud, Alba Vergés, remarcó que “siempre” darán la información “donde sea necesario” y con “transparencia”. Entretanto, el líder del PP, Pablo Casado, criticó el desajuste en los datos de enfermos y fallecidos, y exigió la cifra real de víctimas al ministerio de Justicia.

Escrivá afirma que el ingreso mínimo llegará a finales de mayo El ministro de Inclusión, Migraciones y Seguridad Social, José Luis Escrivá, aseguró ayer que el ingreso mínimo vital estará listo en la segunda quincena de mayo. En este sentido, manifestó que “ese es el calendario que mi ministerio tiene desde el principio en la cabeza”. Escrivá, que se confesó “sorprendido” por la convocatoria de una rueda de prensa para presentar esta medida social, que finalmente no se llegó a producir, también subrayó que las arcas públicas no tienen problemas para financiar las medidas impulsadas por el Consejo de Ministros para luchar contra los efectos de la pandemia y descartó “ejercer presión” sobre las cotizaciones. Mientras, el ministro de Consumo, Alberto Garzón, indicó que el Gobierno de coalición sigue trabajando para que el ingreso mínimo sea “lo más eficiente y digno” posible. La ministra de Igualdad, Irene Montero, admitió “debate” entre los ministros, aunque dijo que el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, está “muy sensibilizado” para sacarla adelante.