Un leridano de 90 años que recibió ayer el alta: "Todas las enfermeras me aplaudieron"
El nonagenario Alfredo Arbiol, que ayer recibió el alta hospitalaria, acompañado de uno de sus hijos.
A sus noventa años, Alfredo Arbiol ha protagonizado una de las historias más optimistas de la crisis del coronavirus. Y es que, después de más de tres semanas ingresado en el hospital Santa Maria de Lleida por esta enfermedad, ayer recibió el alta. “A principios de este mes llamé a mi médico de cabecera porque tenía molestias en las cervicales. Fue entonces cuando me trasladaron a Urgencias y me acabaron ingresando en el hospital Santa Maria”, explicó Arbiol, quien vive solo y asegura que no fue hasta ayer cuando descubrió que se había recuperado del coronavirus. “Pensaba que me habían ingresado por los problemas de las cervicales porque no tenía ningún síntoma parecido a un resfriado”, asegura este leridano, que recientemente compartió sus recuerdos de niñez en el libro La força dels records (Lleida, 1935-1942). Destaca que uno de los momentos más emotivos de su estancia en el hospital tuvo lugar cuando por fin salió de la planta para enfermos de la Covid-19. “Todas las enfermeras me hicieron el pasillo y me aplaudieron como si fuera un paso de Semana Santa”, explica Arbiol, que se sorprendió porque “cuando vi toda esa celebración pensé: sí que debía estar muy enfermo para que se alegren tanto de mi recuperación”. Ante todo da las gracias a los profesionales sanitarios, que durante los 22 días que ha permanecido ingresado “me han tratado de la mejor manera que podría esperar, con mucho cariño”. A la espera de poder retomar su día a día con normalidad, dentro de lo que permiten las restricciones de movilidad del estado de alarma, destaca que “por ahora me encuentro bien”.
