RELIGIÓN SAGRADO
Los musulmanes de Lleida abren el Ramadán desde la Seu Vella
La comunidad musulmana de Lleida celebró ayer el inicio del Ramadán, noveno mes y único sagrado del calendario islámico además de ser uno de los cinco pilares del Islam, en el que no pueden comer, beber, fumar o mantener relaciones sexuales hasta la puesta del Sol. Un mes dedicado además a cultivar el espíritu, meditar, ser paciente, leer el Corán y orar.
Para celebrar el primer día de ayuno oficial cinco miembros de la comunidad musulmana que reza habitualmente en el Palau de Vidre subieron a la Seu Vella con un altavoz para reproducir la llamada al fin del primer día de Ramadán. El acto fue autorizado por el ayuntamiento y la concejala de Derechos y Cooperación, Sandra Castro, señaló que “solo se ha hecho por ser el primer día de ayuno, una fecha muy importante dentro de la fe musulmana, y se ha hecho siguiendo todas las medidas y precauciones sanitarias”. En la provincia viven alrededor de 40.000 musulmanes, los cuales celebrarán el Ramadán más atípico de sus vidas, ya que los rezos comunitarios se han cancelado mientras dure el estado de alarma por el coronavirus.
El Ramadán finalizará con la nueva luna, probablemente el próximo día 23 del mes de mayo
“Cada uno seguirá el ayuno y los rezos desde casa, ni nos planteamos hacer rezos comunitarios mientras dure la crisis sanitaria”; dijo Abdellatif Láatabi, portavoz de la comunidad musulmana. Como marca la tradición, al romper el ayuno las familias se reunieron para degustar todo tipo de platos árabes, y así lo harán durante los próximos 30 días.
Aunque nunca la comunidad musulmana se vio afectada en tantos países por medidas de confinamiento durante el mes de Ramadán, sí ha tenido experiencias en el pasado en lugares concretos debido a epidemias como la peste. El Ramadán finalizará cuando salga la nueva luna, probablemente el 23 de mayo.