TRADICIONES CULTURA POPULAR
Las Fallas, pendientes del Covid-19
Reunión telemática de los pueblos del Pirineo ante la posible suspensión de las Festes del Foc, que abre la puerta a una celebración de carácter simbólico y con aforos reducidos
La Coordinadora de les Festes del Foc dels Pirineus celebró este sábado una reunión telemática con la Associació de Municipis Fallaires para debatir sobre la celebración de la Festa de les Fallas de este año, una tradición ancestral en torno a la llegada del verano y la fiesta de Sant Joan (ver desglose). Los 22 participantes en la reunión coincidieron en que se ha de esperar a la evolución del estado de emergencia provocado por la pandemia de Covid-19 antes de tomar una decisión, “siempre de forma unitaria entre de todos los pueblos fallaires”. En el caso de que se puedan celebrar “se hará de forma simbólica siguiendo escrupulosamente todas las medidas de seguridad y protocolos sanitarios y reduciendo los aforos tanto de participación como de público”, explicó la presidenta de la Associació de Municipis Fallaires, del consell de la Altab Ribagorça y alcaldesa de Vilaller, Maria José Erta.
También se creó una comisión entre todas las comarcas de Catalunya y Aragón, así como de todos los territorios relacionados con las fiestas del fuego en Andorra, Francia y Aran con el fin de crear una plataforma de contacto para generar un documento de funcionamiento y de gestión.
Comarcas y pueblos afectados crearon una comisión de gestión y funcionamiento
Según Erta, ha de estar viva la llama de la Festa de les Fallas y el sentimiento fallaire se ha de mantener presente para salvaguardar la tradición ya que es la esencia de la cultura de los pueblos fallaires. No obstante, remarcó que con el actual estado de emergencia por el coronavirus se ha de priorizar la salud de las personas siguiendo las indicaciones de las autoridades sanitarias competentes.
Cabe recordar que la declaración de la Festas del Foc en los Pirineos como patrimonio de la humanidad en el año 2015 supuso un impulso para la valorización de la fiesta de las fallas, haros y brandons y un revulsivo turístico.