ESNOTICIA
Los alcaldes, indignados por la división provincial para aplicar el desconfinamiento
Municipios en el límite de Lleida como Torà o los de la Cerdanya leridana tienen su hospital de referencia en otras provincias || Temen que afecte a los desplazamientos laborales y reclaman más información
La organización del desconfinamiento por provincias encendió las redes sociales ya el martes por la noche y molestó a vecinos de municipios situados zonas de frontera con otras provincias. Por ejemplo, Torà, en la Segarra, que tiene el CAP de referencia en Calaf (Anoia), o Cervera, con el hospital de Igualada, en la Anoia. Mientras en Passanant y Belltall (Conca de Barberà) se mostraron preocupados porque su médico, de Tàrrega, no podrá visitarles. Un vecino de Tàrrega se extrañó de poder desplazarse 250 km para ir a Vielha y no poder ir a Montblanc, a solo 35 km de la capital del Urgell. La alcaldesa de Fraga, Carme Costa, señaló a su vez que aún es muy precipitado porque no hay una norma concreta. “Debemos esperar y atender lo que diga el ministerio de Salud, sin unas directrices concretas sobre movilidad entre provincias, es arriesgado adelantarse”. No obstante aseguró que muchos de los vecinos de Fraga, que tienen el hospital de referencia en Lleida, podrán desplazarse igualmente. “Creo que esto no será un problema e irán tal y como se ha hecho hasta ahora, que se autorizaba la movilidad en caso de urgencia”, dijo. El alcalde de Almacelles, Josep Ibarz, pidió al subdelegado del Gobierno en Lleida, José Crespín, que pida al Gobierno reconsiderar la delimitación provincial. Planteó flexibilizar esta medida en zonas limítrofes como la Franja, ya que existe un “perjuicio” económico y personal, porque muchas familias tienen vínculos a ambos lados del límite administrativo. En la Cerdanya (seis municipios están en Lleida y 11 en Girona), también hubo polémica. El alcalde de Prats i Sansor, Xavier Picas, dijo que el plan “no tiene lógica”. El municipio tiene como hospital de referencia el de Puigcerdà. El alcalde de Riu, Miquel Pons, pidió “flexibilidad” en la movilidad en territorios, también para los trabajadores.