Ellas trabajan doble, como siempre

El confinamiento obligatorio de la población ha ayudado a bajar la curva de contagios por coronavirus, aunque también ha aumentado el volumen de tareas domésticas, que en el caso de las familias con hijos se han agudizado ante el cierre de los centros escolares. Según un estudio conjunto de las universidades Pompeu Fabra (UPF) y de Barcelona (UB), las mujeres siguen siendo las responsables de la mayoría de tareas del hogar durante el período de confinamiento. A partir de una encuesta en la que participaron en abril más de 7.000 personas con hijos en edad escolar, las profesoras de Economía Libertad González y Lídia Farré concluyeron que la mayoría de mujeres se encargan de la colada (un 39% más que los hombres), de la limpieza del hogar (29%) y de un cuidado de los niños que, a pesar de que ahora se ha repartido más entre los dos progenitores, sigue recayendo sobre todo en las madres. La única actividad en la que el hombre tiene un papel destacado desde que se decretaron las restricciones de movilidad es la compra, la tarea en la que se percibe el cambio más importante. Según el estudio, antes del estado de alarma los padres se responsabilizaban de la compra en un 20% de los hogares y con la nueva situación ha aumentado al 38%, mientras que en la mujer baja del 38 a un 28%. En el resto de hogares (35%), esta actividad se reparte de forma igualitaria. Silvia Naval, vecina de Almacelles con cuatro hijos de entre 4 meses y 13 años, considera que “normalmente las madres siempre estamos muy pendientes del cuidado de los pequeños y en estos días en los que no hay colegio te das más cuenta de lo duro que es conciliar”. Asegura que “las semanas de confinamiento han coincidido con mi baja por maternidad y mi marido ha seguido trabajando, por lo que yo he tenido ‘más tiempo’ para algunas tareas domésticas”. Aun así, destaca que “en nuestra rutina habitual los dos trabajamos fuera de casa y nos repartimos las tareas de manera igualitaria”.

Yaisa Alejo, Lleida: «Hay que inculcar a los niños el reparto de tareas»

Yaisa asegura que durante el estado de alarma “mi marido y yo hemos seguido trabajando y nos hemos ido compaginado para el cuidado de los niños”. En las tares del hogar, “yo me encargo de poner la lavadora, él de la plancha y entre todos, incluidos los niños, recogemos la cocina después de comer. Es importante inculcar a los pequeños que no es la mamá la única que trabaja en casa”.

Silvia Naval, Almacelles: «Compaginar niños y labores en casa es duro»

A Silvia, el confinamiento le coincidió con su baja por maternidad. “Ahora que los niños no tienen colegio, necesitan que los acompañemos y guiemos mientras hacen las actividades escolares, por lo que se hace más duro compaginar su cuidado con las tareas del hogar”. Destaca que “en circunstancias normales ambos trabajamos fuera de casa y nos repartimos las tareas domésticas”.

Daniel Fernández, Balaguer. «Siempre me encargo de la compra y cocinar»

Daniel considera que “es importante repartirse las tareas del hogar en función de lo que nos gusta o se nos da mejor”. Apunta que “trabajo una semana sí y otra no, así que lo tengo un poco más fácil para conciliar la vida laboral y la familiar, también durante el confinamiento. Con mi mujer nos repartimos las labores. Yo normalmente me encargo de la compra y de hacer la comida”.