ESNOTICIA
Autoescuelas del Pirineo retoman las clases teóricas y prácticas con largas listas de espera
Tienen que limitar el aforo del aula a un tercio y aplican medidas higiénicas para evitar contagios || En algunos centros, como el Racc Sic Formació de La Seu, hay un centenar de personas apuntadas
Las autoescuelas situadas en la región Sanitaria del Alt Pirineu y Aran han reabierto sus puertas esta semana, aunque con restricciones. Además de poner el acento en el uso de marcarillas y la desinfección de los coches para garantizar unas prácticas seguras, solo pueden utilizar un tercio del aforo durante las clases teóricas. Uno de los doce centros leridanos que retomaron el martes la actividad es el Racc Sic Formació de La Seu d’Urgell. Su director, Lluís Sànchez, explicó ayer que más de sesenta alumnos están pendientes del examen práctico y cerca de cuarenta conductores tienen que someterse a la prueba del curso de recuperación de puntos. A pesar de que las autoescuelas del Pirineo han podido abrir sus puertas al avanzar en la desescalada, Sànchez lamenta que los aspirantes “no podrán examinarse hasta que Ponent pase a la Fase 2, pues los examinadores se desplazan desde Lleida”. El centro dispone de dos profesores que realizan una media de 10 clases prácticas por día cada uno de ellos. Lo que más preocupa, aseguran, es la limitación del aforo en el centro, que ha quedado reducido a un tercio “y nos limita a tener seis alumnos por aula”. En cuanto a la formación teórica, Sànchez explica que “estamos incentivando las clases online, pero por ahora los cursos de recuperación de puntos solo son presenciales”. Antes y después de las prácticas, desinfectan todos los elementos del vehículo que manipula el alumno, entre ellos volante, cambio de marchas, espejos retrovisores y puertas. En la zona de recepción han instalado mamparas de protección y desinfectan tanto las aulas como las zonas comunes. Sànchez explicó que también obligan a utilizar mascarilla a alumnos y a los profesores y que cuando se hagan exámenes “será un requisito indispensable” la utilización de mascarilla y guantes. En cuanto a la falta de examinadores, la Dirección General de Tráfico se ha comprometido a detallar en los próximos días cómo será la “nueva normalidad” en capacidad de exámenes.
Antes del estado de alarma había una lista de 2.600 personas en Lleida
La campaña de verano concentra el mayor volumen de negocio para las autoescuelas, que este año piden a la Dirección General de Tráfico (DGT) que continúe haciendo exámenes durante el mes de agosto, aunque sea reduciendo el número de pruebas. Si las huelgas de examinadores de los últimos siete años y la falta de personal administrativo ya hicieron mella en el sector, desde la Federació d’Autoescoles de Catalunya aseguraron que “seremos uno de los sectores que más tardaremos en recuperarnos de esta caída”. Si semanas antes del estado de alarma unos 2.600 leridanos estaban pendientes de poder hacer el examen práctico del carnet de conducir, con un tiempo de espera de entre dos y tres semanas, los dos meses de paralización por el coronavirus han agravado la situación en las autoescuelas.