Emotivo adiós de Lleida a sus víctimas y Torra anuncia un homenaje para todas

Lleida ofreció ayer a los ciudadanos que han muerto desde el inicio de la pandemia de Covid-19 la despedida que no tuvieron en un emotivo acto en la Mitjana, al que asistieron familiares de víctimas y que fue presidido por el presidente de la Generalitat, Quin Torra, que anunció un homenaje para todos los fallecidos de Catalunya el 9 de julio.

Emocionados, algunos sin poder reprimir las lágrimas, los familiares de personas fallecidas durante el confinamiento en Lleida rellenaron con tierra la escultura del artista Erik Schmitz en recuerdo de las víctimas, rellenando también simbólicamente el vacío dejado por sus seres queridos. Así culminó ayer el homenaje organizado por la Paeria a todos los leridanos que han muerto desde el inicio de la pandemia de Covid-19, al que asistió el presidente de la Generalitat, Quim Torra; la delegada del Gobierno central en Catalunya, Teresa Cunillera; y el alcalde, Miquel Pueyo. Tres representantes de las familias relataron su tristeza por no haber podido despedir a sus allegados “como se merecían” y aseguraron sentirse aliviados por poder compartir su duelo.

Torra recordó su propio confinamiento cuando estuvo afectado de coronavirus y dijo que Catalunya se enfrenta ahora a “grandes desafíos”. Alentó a la sociedad a “cambiar sus valores colectivos, ahora que sabemos lo que es esencial en nuestras vidas”. Agradeció la labor del personal sanitario y de los trabajadores de los servicios esenciales, y reconoció que “no hemos encontrado cómo hacer bien el acompañamiento a las personas queridas que han muerto estos meses”. “Muchas familias no han podido acompañar a quienes más querían en sus últimos momentos. Es una herida profunda en el alma de nuestra sociedad. Ahora nos toca compartir el duelo y recordar todos los nombres, con la esperanza de tirar adelante, pero sin que el olvido nos venza”, subrayó, y anunció que el 9 de julio “recordaremos a todos los fallecidos en un acto de homenaje nacional para tenerlos a todos presentes en la memoria”. Pueyo, por su parte, dijo que “hemos experimentado nuestra fragilidad” y remarcó que “recordar a los difuntos es un signo de generosidad”