Una aplicación para denunciar abusos

Que las escuelas municipales de arte de Lleida (la Escola d’Art Leandre Cristòfol, el Aula de Teatre y el Conservatori de Música) estén libres de casos de abusos o situaciones de discriminación, acoso, u otros tipos de violencia, ya provengan por parte del alumnado o del personal docente. Este es el objetivo de la aplicación móvil Co-resol que presentó ayer la Paeria, una herramienta que a partir del nuevo curso (aunque ya puede utilizarse) permitirá tanto a las víctimas como a los testigos de agresiones poder denunciar este tipo de comportamiento dentro de las aulas. En este sentido, su funcionamiento es muy sencillo e intuitivo. Una vez descargada la app, que es gratuita y válida tanto para iOS como para Android, debe introducirse el código “paeria-edu”. Posteriormente, se puede escoger entre tres interlocutores a los que enviarles la denuncia: una psicóloga especializada en violencia de género, un trabajador social experto en atención al colectivo LGTBIQ y una profesional de la educación sexual. Tras elegir a la persona, se expone el caso en cuestión y se procede a su envío, ya sea a título personal o de manera totalmente anónima. La previsión es que en un plazo máximo de 48 horas laborables la denuncia obtenga respuesta y se inicie una conversación con el interlocutor que ofrecerá su ayuda y asesoramiento, y hará que los centros activen las acciones pertinentes en cada caso. Asimismo, la concejala de Educación, Derechos Civiles y Feminismos, Sandra Castro, aseguró que en caso de llegar a juicio, estas denuncias podrían presentarse como prueba. “Nuestro propósito es que las aulas leridanas sean espacios seguros y alejados de cualquier tipo de violencia. Además, animamos a todos aquellos observadores pasivos de estas situaciones a denunciar. Hacerlo no es de chivatos, sino de valientes”, remarcó Castro. La implementación de esta app forma parte del programa “Espacios seguros en el ámbito educativo”, un proyecto de la Paeria que surgió a raíz de las denuncias por supuestos abusos sexuales por parte del exdirector y un profesor presentadas por nueve exalumnas del Aula de Teatre de Lleida en 2018 y que la Fiscalía terminó archivando en 2019 al haber prescrito los hechos denunciados, ya que los abusos serían del 2001 al 2008.