El teletrabajo, de la urgencia a una nueva forma de vivir

El teletrabajo se convirtió con la pandemia, de la noche a la mañana, en protagonista en aquellas empresas y empleos donde, por sus caracterías, era posible. La mitad de las pequeñas y medianas empresas de las comarcas de Lleida (52,4%) han optado estos meses por esta forma de continuar activas y en el mercado. Sólo una parte de las compañías han vuelto a la normalidad y son muchas las que se plantean qué hacer a la vuelta de las vacaciones estivales ante la posibilidad de rebrotes del coronavirus y con unas exigencias de espacios amplios entre trabajadores, de al menos metro y medio, o de llevar puesta la mascarilla durante toda la jornada laboral. La Encuesta de Población Activa sitúa en el 16% los trabajadores que han cubierto jornadas laborales desde casa en el segundo trimestre del año, lo que supone unos 30.500 leridanos. En este contexto y después de lo que fue una medida de urgencia, ahora el debate se centra también en la regulación del teletrabajo y quién debe hacerse cargo de los costes que conlleva, porque en la mayoría de casos el trabajador pone los medios, desde el ordenador hasta internet.

De momento, ya ha generado una nueva polémica entre las dos “almas” del Gobierno de Pedro Sánchez. La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz (Podemos), tiene claro que es necesario establecer reglas claras y cuenta con los sindicatos de su lado, mientras que la vicepresidenta económica, Nadia Calviño, apuesta por la negociación entre empresa y plantilla. Trabajo afirma que se debe compensar a los empleados por los gastos adicionales y quiere llevar ya un texto al próximo Consejo de Ministros. Los sindicatos defienden que el teletrabajo tenga carácter voluntario, que las empresas pongan los medios y que se compense económicamente los gastos derivados para los empleados. La patronal advierte contra regulaciones que en la práctica desincentiven el teletrabajo, porque la normativa tendría una aplicación que iría más allá de hipotéticos confinamientos similares a los vividos la pasada primavera por el coronavirus. Los empresarios quieren margen para la negociación en el marco de las compañías y los convenios laborales. Calviño tampoco quiere legislaciones rígidas que se puedan traducir en deslocalizaciones de contratos, que precisamente facilita el teletrabajo.

Las empresas de Lleida urgen desplegar la fibra en el territorio Las patronales de Lleida coinciden en la necesidad de que Lleida cuente con infraestructuras acordes al siglo XXI y entre ellas es clave la fibra óptica en todo el territorio. Por una parte, se ha demostrado que es urgente para poder afrontar las necesidades del teletrabajo en tiempos de pandemia, pero también es una oportunidad de futuro. Ha quedado claro que una persona puede estar trabajando desde la localidad más remota para una compañía ubicada en otro territorio sin problema. Es decir, puede suponer también una fórmula para evitar el despoblamiento de zonas rurales e incluso para atraer a trabajadores de cierto tipo de compañías que pueden afrontar sus jornadas con un ordenador y un teléfono.