Aire libre frente a las restricciones

Sol y temperaturas suaves invitaron ayer a salir a un gran número de personas, tanto leridanos como visitantes. Con los bares y restaurantes cerrados por las restricciones para frenar la propagación de la Covid-19, muchos organizaron comidas al aire libre, ya fuera en zonas habilitadas para pícnic en el Pirineo o bien sobre el césped de la canalización del Segre a su paso por Lleida ciudad. Los espacios naturales leridanos recibieron también numerosos visitantes, desde excursionistas hasta familias enteras de ‘boletaires’, coincidiendo con el primer día en que se limitó el aforo de parques de las comarcas de Barcelona y Girona.

El parking de la Masieta, en Sant Esteve de la Sarga, se llenó de vehículos de turistas que decidieron pasar el día en el Cogosto de Mont-rebei. El parking es de pago, tiene una capacidad para 160 vehículos, aunque ahora tiene un aforo limitado a 100 plazas como medida de precaución contra la Covid. Carteles recordaban a los visitantes la obligación de llevar mascarilla, de guardar la distancia y otras normas para evitar contagios. Numerosos coches aparcados a los márgenes de la carretera daban idea de la afluencia de público en el congost de Mu de Camarasa y también en la zona junto al Segre conocida como la Platgeta, en el mismo municipio. En esta y otras localidades podían verse también autocaravanas, cada vez más frecuentes en las comarcas leridanas ante la proliferación de espacios habilitados para estacionarlas.

El cierre de restaurantes y bares empuja a buscar alternativas para pasar el fin de semana en familia

Al margen de los espacios naturales, el Eix Comercial de Lleida registró de nuevo una elevada afluencia de público con colas ante tiendas debido a la limitación de aforo. En la canalización del Segre, grupos de jóvenes que se habían reunido allí para comer se ponían la mascarilla tras el último bocado. En algunos municipios, la oferta cultural iba acompañada de actividades para hacerla más atractivas. Es el caso de La Baronia de Rialb, en la Noguera, con un taller de fotografía y una visita al monasterio de Santa Maria de Gualter.