FESTIVIDAD CULTURA
La 'inspiración' de la Seu Vella
El monumento celebra su fiesta anual, en la que el jefe de epidemiología de Lleida destaca su “capacidad inspiradora” en tiempos de pandemia || Solo se celebran el 15% de los actos habituales
El Turó de la Seu Vella celebró ayer su festividad anual, marcada, como todos los actos culturales, por la pandemia de la Covid. Los organizadores, la Associació Amics de la Seu Vella, defendieron que la celebración se haya podido sacar adelante, aunque solo se pudo hacer el 15% de los actos previstos. Por ejemplo, a lo largo de la mañana se exhibieron una quincena de vehículos históricos, se celebró un concurso de pintura rápida, un taller de papiroflexia y una recreación histórica de enfermeros durante la Guerra Civil y la Segunda Guerra Mundial. Esta celebración se lleva a cabo cada año el último domingo de octubre, en recuerdo del día la consagración de la antigua catedral en 1278.
La jornada se centró en la entrega de premios y distinciones relacionadas con el monumento; una misa que no pudo oficiar el obispo, Salvador Giménez, en cuarentena tras ser contacto de un positivo; y en la lectura de la glosa por parte del jefe de epidemiología de Lleida y presidente de la Sociedad Española de Epidemiología Preventiva, Pere Godoy. Este detalló cómo la Seu Vella ha sido una “guía” en tiempos de pandemia.
Godoy recordó las distintas epidemias que ha sufrido el mundo a lo largo de la historia, como la peste, el cólera, la viruela, el sarampión, la tuberculosis, la fiebre amarilla, la gripe y, ahora, la Covid-19, “que llegó a Lleida por un viaje del Inserso a Benidorm”. De hecho, señaló que “la Seu Vella ha sido testigo de pandemias des de hace más de mil años”.
Godoy pidió la “implicación de toda la población para reducir la velocidad de transmisión del virus” y señaló cómo “el homo sapiens ha sabido dominar el mundo y las pandemias gracias a agruparse y cooperar alrededor de los símbolos”. En este sentido, dijo que “los leridanos tenemos la fortuna y el privilegio de disponer de un símbolo tangible y potente como la Seu Vella”. De hecho, manifestó que “en estos meses de pandemia, visualizar el monumento ha sido un elemento inspirador y orientador de mis responsabilidades profesionales”. Destacó que “tenemos que sentirnos afortunados de disponer de este símbolo local inspirador de cohesión y cultura”.
La Casa de Aragón puso el punto final al encuentro con una tocada de tambores y bombos “para espantar el virus”.
El viaje de dos meses de Mónica El director del Turó de la Seu Vella, Joan Baigol, confía en que, en unas semanas, la campana Mónica, que se descolgó en 2014, pueda viajar “por fin” a Austria para ser reparada “en solo dos meses”. Asimismo, espera que las trazas del siglo XIII halladas en la cubierta sean un “apoyo” a la candidatura a patrimonio mundial de la Unesco.