La restauración carga las pilas

Bares y restaurantes llevan más de una semana adaptándose a la nueva normalidad tras recuperar la actividad parcialmente el pasado 23 de noviembre y muchos de ellos se las ingenian para mantener el máximo número de clientes teniendo en cuenta que el aforo interior está limitado por ahora al 30% y el exterior (con posibilidad del 100%) está más que mermado por el frío tanto en el llano como en el Pirineo. Algunos han doblado turnos al mediodía, conscientes de que el toque de queda (deben cerrar a las 21.30 horas) limita las cenas, mientras que otros impulsan una revolución horaria para convertir al público nocturno en comensales a la hora del té (ver desglose central).

Sea como sea, la restauración se pone las pilas a la espera de un nuevo tramo de desescalada y recuperando sanas tradiciones como la lectura de la prensa en el bar. El presidente de la Federación de Hostelería, Josep Castellarnau, incidió ayer en la ausencia de riesgos por leer el diario en un lugar de pública concurrencia. De hecho, “es un placer que no debe desaparecer, un servicio que el cliente busca”, remarcó, aunque cada vez más “la prensa en papel deba convivir con el formato digital”.

El gremio remarca también la buena respuesta de la clientela, tanto a la hora de seguir los protocolos de seguridad como al consumir en establecimientos próximos. Cristina Bombín, del restaurante Cal Teo de La Seu, señaló que “los clientes se comportan muy bien y utilizan las medidas de seguridad y las mascarillas de forma adecuada”. Pese a todo, señaló que algunos establecimientos se saltan las reglas y dijo que hay pocos controles en este sentido: “Creo que en lugar de obligar a un cierre general del sector deberían haber hecho controles y obligado a cerrar a los que no cumplían los protocolos”. El gerente de la Federación de Hostelería, Ramon Solsona, señaló en este sentido que “lo que pedimos ahora es no ir hacia atrás”.

Antoni Clarisó, de Casa Tere de Lleida, asegura que están “muy contentos con la acogida por parte de nuestra clientela, que ha respondido muy bien y un ejemplo de ello es que ahora mismo no podemos hacer frente a todas las reservas que llegan”. Salvador Clop, de El Parador de Bell-lloc, dijo que la situación mejorará cuando se permita la movilidad comarcal en fin de semana y señaló que “tenemos a media plantilla en ERTE” porque al 30% de aforo “no puedo tener el 100% de la plantilla”.

Ocho restaurantes reivindican avanzar la hora de la cena Ocho restaurantes de las comarcas del llano se han sumado a la campaña early bird dinners, que quiere avanzar el horario de las cenas a las 19.30 sin renunciar a la cocina en mayúsculas. Para ello han preparado Sopars de Xef por 40 euros desde el viernes y hasta el 19. Son Aimia, Ferreruela, Resquitx, L’Espurna, l’Atípic, Saroa, L’Atrevit y Sheyton. La iniciativa es de Como Pomona, con Nufri, Turisme de Lleida, Raimat y Livinda.