ESNOTICIA
Actos de protesta de los hosteleros en Vielha, Balaguer y Barcelona
Unas 300 personas cortan 2 horas la N-230 en Aran, y marcha lenta en la Noguera
Unas 300 personas se manifestaron ayer en Vielha para exigir ayudas directas para el sector de la restauración y los hoteles. Los manifestantes cortaron durante dos horas la rotonda que une la N-230 y la C-28 en Vielha y exigieron flexibilizar las restricciones horarias de los bares y restaurantes. Bajo el lema “Ens estan arruïnant” reclamaron al Govern ayudas directas para afrontar el “el cierre encubierto” que sufre el sector. El presidente del Grèmi d’Ostaleria dera Val d’Aran, Xacobé Bartolomé, señaló que estas nuevas restricciones “matan” al sector, y calificó la situación de “insostenible”. Exigió que se revisen las medidas para adaptarlas a las realidades de cada territorio. “En Aran vivimos de las cenas, especialmente en temporada de esquí”, dijo. Entre los manifestantes también había empresarios de Aran y trabajadores del sector que ven peligrar sus puestos de trabajo. Algunos de los manifestantes llevaban pancartas en las que se podía leer “Se traspasa por decisión política, no sanitaria”, o “Se traspasa por abandono de la administración”. Reclamaron recuperar la movilidad con Francia.
Por otra parte, en Balaguer, unos cincuenta vehículos también protagonizaron una marcha lenta por las calles de la capital de la Noguera para reclamar ayudas directas. El presidente de la Asociación de Comerciantes, Jaume Cañada, apuntó que muchos de los establecimientos se veran abocados a cerrar si se mantienen las actuales franjas horarias. Los vehículos llevaban carteles contra el cobro de impuestos a los negocios cerrados y a favor de salvar el sector y los puestos de trabajo. Cañada destacó que a partir del mañana el 90% de los bares no abrirá “porque no compensa”, dijo.
En Barcelona, un millar de personas participaron en la presta convocada por las patronales del sector, entre ellas la Federación de Hostelería de Lleida. “No podemos más”, “Con la hostelería no se juega” fueron algunas de las consignas que se escucharon en la marcha por las calles de Barcelona pidiendo una mejor gestión de las medidas contra la pandemia del coronavirus y que no se criminalice el sector.