Se cumplen setenta años del DNI

El franquismo instauró en 1951 el Documento Nacional de Identidad culminando un proceso que se inició con un decreto del 2 de marzo de 1944 con un concurso público para su diseño que fue adjudicado a Aquilino Rieusset Planchón que se llevó como premio 30.000 pesetas de las de aquella época. De hecho Fernando VII, ya en 1824, al crear la Policía en España obligó a sus súbditos a cumplimentar un padrón en la que se incluían edad, sexo, estado civil, profesión y, dado que no existían fotografías, una descripción física del titular.

En el DNI original, de color verde y con el águila de Sant Juan, emblema del régimen franquista, se incluía, además de la fotografía, los datos de filiación, profesión y categoría del titular en función de su economía. Los primeros obligados a formalizarlo fueron los reclusos o los que permanecían en libertad vigilada y luego los hombres que, por su profesión, mudaban con asiduidad de domicilio y posteriormente los varones residentes en ciudades de más de 100.000 habitantes y así sucesivamente hasta completar todo el censo de loa habitantes en España.

Zaragoza fue la primera capital de provincia, después de Madrid y Barcelona, donde se expidió el DNI seguida de Valencia y después del resto de municipios españoles hasta completar 59 equipos fijos de expedición.

El número uno del DNI se lo adjudicó para si mismo, el dictador Francisco Franco y el2, para su esposa, Carmen Polo. El tres, para su hija, Carmencita. Del cuarto al noveno quedaron vacantes. Del 10 en adelante y hasta el 99 se bloquearon para la familia real española. Juan Carlos I se quedó el 10, la reina Sofia, el11, el 12 para la infanta Elena y el 14 para la infanta Cristina. Felipe VI lleva el 15, la princesa de Asturias, Leonor, el 16 y su hermana, la infanta Sofía, el 17.

A lo largo de la historia el DNI ha ido experimentando diversas modificaciones. La primera se produjo en 1962 y aguantó hasta 1965, incorporando el estado civil del titular y su grupo sanguíneo. La segunda, en 1965 hasta 1980. A partir de 1985 se suprimió la profesión, el estado civil y el grupo sanguíneo. En el 2006 se incorporó un chip para convertirlo en un documento electrónico y en el 2015 se lanzó el DNI 3.0 con tecnología NFC.

El Documental Nacional de Identidad, personal e intransferible, tiene un periodo de validez de dos años para los menores de cinco años; de cinco para los menores de 30; de 10, para los menores de 70 y permanente para los mayores de esa edad.

En Lleida se comenzó a expedirse en la comisaria de policía ubicada en los bajos del Gobierno Civil (Plaça de la Pau) para pasar posteriormente a las dependencias de la calle Sant Marti, Cappont y actualmente en Prat de la Riba, en el edificio del antiguo Gobierno Militar.