La igualdad avanza a paso lento

Uno de los principales caballos de batalla de las asociaciones feministas es poner fin a los roles sociales establecidos, aquellos aspectos ‘invisibles’ que siguen reforzando el techo de cristal y que desde que se decretó la pandemia de la Covid-19 se han acentuado. En la ciudad de Lleida, nueve de cada diez excedencias para el cuidado de hijos y familiares son de mujeres.

Estos son algunos de los datos del estudio encargado por la Paeria a la consultora G360 Cartografies Humanes i Socials para conocer la realidad social y económica de las mujeres de Lleida y poder avanzar hacia políticas de igualdad efectivas. El alcalde, Miquel Pueyo, y la concejala de Feminismo, Sandra Castro, presentaron ayer los resultados de este informe, que también revela que en 2019 el 73% de los hogares monoparentales de la ciudad tenía a una mujer como cabeza de familia y que, aunque cada vez son más leridanas tienen niveles de estudios universitarios, un 36% reciben salarios iguales o inferiores al Salario Mínimo Interprofesional (SMI) y de media cobran un 23% menos que los hombres.

Ante esta situación, el ayuntamiento admitió que “todavía queda mucho trabajo” para revertir el empobrecimiento femenino y anunció que el curso que viene aumentarán la oferta de plazas educativas de 0 años, como medida para facilitar la conciliación. El estudio, que también analiza aspectos como el uso del tiempo libre o la violencia machista, revela que seis de cada diez voluntarios de la ciudad son mujeres y que en 2019 se presentaron 1.136 denuncias por violencia de género.

Asimismo, según un informe que publicó ayer el sindicato CCOO, el año pasado las leridanas representan un 45,8% de la población activa y un 46,5% de la población ocupada. En cuanto al salario, de media al año cobran 3.213 euros menos que los hombres.

Vergés defiende los actos previstos para el 8-M

La consellera de Salud, Alba Vergés, defendió ayer la viabilidad de los actos previstos en el Día Internacional de la Mujer porque se están organizando “con la máxima prudencia” para incluir las medidas de prevención contra la Covid-19. Insistió en que se deben compatibilizar “todos los derechos” fundamentales, con la gestión de la pandemia. En Madrid, la delegación del Gobierno prohibió ayer cualquier manifestación o concentración de cara al 8-M.

Decenas de leridanas reclaman un acceso al aborto libre y gratuito

Una treintena de mujeres se concentraron ayer por la tarde ante las puertas del hospital Arnau de Vilanova para reclamar un acceso al aborto libre y gratuito en todo el territorio catalán.

Con pancartas con mensajes como ‘la objeción de conciencia no es ninguna razón’, las organizaciones feministas Marea Lila y Dones Lleida leyeron sendos manifiestos en los que criticaron la decisión de Salud de acreditar dos clínicas privadas para practicar interrupciones voluntarias del embarazo en formato quirúrgico y aseguraron que “la opinión de unos pocos [objetores de conciencia] no puede dejar en papel mojado los derechos que tanto nos han costado conseguir”.

La protesta, impulsada por la asociación Drets Sexuals i Reproductius, también se llevó a cabo en La Seu d’Urgell, Almacelles y Tremp, donde fue multitudinaria.

En cuanto a las recientes declaraciones del obispo de Solsona, Xavier Novell, calificando el aborto como un “genocidio” y “un crimen abominable “, el ayuntamiento de Tàrrega declinó posicionarse al considerar su alcaldesa, Alba Pijuan, que “las instituciones deben estar por encima de estos conflictos”.