ESNOTICIA
Beatriz Mothe: «Nos quedamos a las puertas del liderazgo ante la falta de conciliación»
Investigadora d’Irsicaixa/Can Ruti
¿Puede describir su área de investigación y los proyectos en los que está trabajando actualmente?
Soy médico especializada en enfermedades infecciosas como el VIH, si bien en el último año una parte de los ensayos clínicos e inmunoterapias se han centrado en el estudio de la Covid-19. Además de los proyectos del IrsiCaixa para desarrollar una vacuna y tratamientos eficaces contra este nuevo virus, desde el Hospital de Can Ruti de Badalona participamos en el ensayo clínico en fase III de la vacuna de la compañía Janssen (Johnson & Johnson) para evaluar la eficacia de una segunda dosis.
Ya se han aprobado los resultados de una dosis y ahora hay un segundo estudio internacional en marcha que determinará si aquellos segmentos de población en los que puede haber una eficacia más baja pueden beneficiarse de una segunda dosis.
¿En algún momento se planteó que ser mujer podría ser un problema para alcanzar sus metas profesionales?
Hasta ahora no he tenido la sensación que lo haya tenido más difícil por ser mujer para llegar donde estoy. Sí que es verdad que un punto de inflexión del techo de cristal en la investigación sería el momento en el que te planteas la maternidad.
La carrera científica es muy competitiva y la mayoría de mujeres nos quedamos a las puertas del liderazgo por la falta de medidas de conciliación reales que suplan la falta de tiempo que le tienes que dedicar a la familia. Yo soy madre de una niña de tres años y ahora estoy embarazada, así que me enfrento a un año que sé que será difícil.
Desde los últimos meses del embarazo hasta que te puedes reincorporar y trabajar al mismo ritmo pasan muchos meses, en los que los demás siguen rindiendo. Y querer obviar esta realidad es ponerse una venda en los ojos.
¿Ha sentido algún prejuicio en su carrera científica?
A veces hay un complejo de inferioridad causado por esa impronta social que nos dice que nosotras no debemos estar en esas posiciones de liderazgo y que, si llegamos ahí, tienes que justificar que te lo mereces. Y para demostrar esas desigualdades impuestas por la sociedad solo hay que ver que las mujeres con carácter tienen una connotación negativa y son vistas como ‘agresivas’, mientras que en los hombres es sinónimo de decisión y liderazgo.
¿Considera que los referentes femeninos en la investigación siguen invisibilizados?
Sí, y un ejemplo de ello son los expertos que salen en televisión a raíz de la pandemia. De entre todos ellos, las mujeres se pueden contar con los dedos de una mano. La realidad es que hay muchísimas mujeres haciendo investigación o que están al frente de unidades post-Covid, pero nadie habla de ellas y eso perpetúa esta invisibilización.