Sociedad
Seat 600, el coche en el que cabía toda la familia
Se van a cumplir 65 años de la aparición del primer modelo del utilitario que se convirtió en símbolo de la España del desarrollo
Se van a cumplir los 65 años de la aparición en las carreteras españolas del primer modelo del Seat 600, fabricado en la Zona Franca de Barcelona, y que se convirtió en ícono de la España del desarrollo franquista junto a la televisión y el turismo. El coche, ahora una verdadera pieza de culto para los coleccionistas se fabricó hasta 1973 en que salieron los últimos modelos de fábrica para ser sustituidos por modelos más modernizados como el "133", el "Panda", el "Marbella" o más recientemente, el "Ibiza".
A lo largo de esos 16 años, entre el primer y último coche, se vendieron un total de 800.000 unidades, a un precio de 63.000 pesetas (menos de los 380 euros actuales). El "600" se inspiraba en el "Fiat 600" de origen italiano y tenía dos puertas, cinco plazas, medía 3,30 metros de largo y un peso de 585 kilos. Su potencia era de 633cc. y 21,5cv. Su velocidad máxima, con cuarto marchas, era de 95 kilómetros a la hora. A lo largo de los años fue evolucionado en capacidad y potencia (dentro de sus limitadas prestaciones) pero quizá la novedad más popular fue la que apareció en 1958 con un "600" descapotable.
Del modelo de Seat se recuerda su pequeño motor trasero y, en el compartimiento delantero, el depósito de combustible, la batería y la rueda de recambio. Había tan poco espacio delante para maletas que la mayoría de estos vehículos instalaron en su techo la popular baca que le confería un aspecto singular junto a su abarrotado interior. Oficialmente era un cinco plazas, pero popularmente se decía de él que podía albergar a toda la familia: matrimonio, hijos, la suegra y la jaula con el periquito.