Unas 500 personas celebran la vigilia pascual en la Sagrada Familia

Unas 500 personas celebraron ayer la vigilia de Pascua en la basílica de la Sagrada Família de Barcelona. Se trata de uno de los eventos más tradicionales de la liturgia de la Semana Santa, donde se enciende el cirio pascual con el fuego nuevo y se bendice la nueva agua.

Este año la celebración estuvo de nuevo fuertemente marcada por la pandemia de la Covid-19. Así, los asistentes se tuvieron que registrar previamente para asistir a la misa, presidida por el cardenal arzobispo de Barcelona, ??Joan Josep Omella.

Todas las personas mantuvieron las distancias de seguridad con la mascarilla puesta en todo momento. Al inicio, se distribuyó gel hidroalcohólico y se vigiló que no se formaran aglomeraciones.

La pandemia de coronavirus ha protagonizado un año más las celebraciones religiosas, entre ellas esta vigilia pascual, que se ha llevado a cabo en el interior de la Sagrada Família con un aforo reducido. Así, el presidente delegado de la Junta Consultora de la Sagrada Família, Esteve Camps, explicó que la sala puede acoger unas 4.000 personas. “El Procicat fijó el límite en 500 personas, aunque el 30% de esta sala podrían ser unas 1.200”, añadió.

Durante la misa, Omella recordó a los creyentes,

durante su intervención,

que “el don de la vida” es “maravilloso”. Asimismo, señaló que a través de “la oración y el amor” se llega a la esperanza, totalmente necesaria “en medio de todos los dolores”.