La fatiga pandémica pasa factura a las parejas

El estricto confinamiento domiciliario al inicio de la pandemia y las restricciones de movilidad que han acompañado la ‘nueva normalidad’ han marcado un antes y un después en muchas relaciones de pareja. Y es que la falta de espacio personal, sumado al estrés y la incertidumbre de la crisis sanitaria, han sido la peor de las combinaciones para acentuar las desavenencias de las parejas que ya arrastraban problemas desde antes de la pandemia.

Así lo constata Sònia Muñoz, una de las psicólogas del Centre PsiCo Lleida que, aunque apunta que en los últimos meses no han registrado un incremento de las terapias de pareja, sí que han observado una serie de dificultades que se repiten en las relaciones a causa de la denominada ‘fatiga pandémica’. “Las limitaciones en las actividades de ocio, en la movilidad y en las relaciones sociales han hecho mella en muchas relaciones que están viviendo esta situación desde hace más de un año”, explica Muñoz, mientras destaca que “aquel espacio individual que toda persona debe tener más allá de su pareja y de su familia, ahora mismo está muy distorsionado”.

En cuanto al perfil mayoritario de personas que acuden a estas terapias, son parejas con hijos que arrastran problemas desde hace tiempo y que acuden a este tipo de ayuda como último recurso para evitar la separación. 

Las parejas que acuden a la psicóloga tienen 45-50 años, con hijos y un deterioro previo en la relación

Más allá del trabajo con parejas, el sentimiento de soledad y la ansiedad que ha generado la crisis han disparado la atención a adolescentes que acuden a terapia por trastornos alimentarios o por autolesiones. “En las semanas de confinamiento algunos jóvenes pasaron a hacer dos horas diarias de deporte y restringieron el consumo de alimentos. Dado el extraño contexto de reclusión domiciliaria, eso provocó que la enfermedad pasara desapercibida y que los padres la confundieran por conductas saludables”, explica Muñoz, al mismo tiempo que destaca que las terapias individuales, tanto en menores como en adultos, se han disparado más del doble tras la pandemia.

«El confinamiento ha colmado el vaso»

Sònia Muñoz. Psicóloga del Centre Psico Lleida

¿Cuáles han sido los efectos de la pandemia en las relaciones de pareja?

No hemos registrado un incremento de terapias de pareja tras la crisis sanitaria, aunque sí hemos constatado que, en las parejas que ya arrastraban un deterioro, el confinamiento domiciliario ha sido la gota que ha colmado el vaso y el motivo principal por el que han pedido ayuda.

¿Cuáles son los problemas más habituales?

Cada terapia empieza por motivos exclusivos de cada pareja aunque las dificultades que se repiten es la falta de espacio personal provocado por el estricto confinamiento domiciliario y la posterior fatiga pandémica. Durante los meses de reclusión, las parejas tuvieron que convivir durante las 24 horas en espacios y tempos que no son habituales: el teletrabajo y la crianza constante de los niños han agravado los conflictos de estas parejas que ya tenían problemas.