Rehabilitación visual de Km0

La ONCE de Lleida inauguró ayer una aula de rehabilitación visual que propiciará que más de cuatrocientas personas con discapacidad visual de las comarcas leridanas ya no tengan que desplazarse a Tarragona para aprender técnicas, estrategias y recursos para llevar una vida más autónoma. Profesionales especializados enseñarán a aquellas personas que no han perdido la visión por completo a optimizar su “resto visual” con las ayudas ópticas o electro-ópticas más adecuadas, como pueden ser lupas o gafas de aumento.

El delegado territorial de ONCE en Catalunya, Enric Botí, aseguró ayer durante la presentación de este nuevo servicio que “el año pasado cuatrocientas personas perdieron la vista en Catalunya y, a pesar de la crisis provocada por la Covid-19, nuestra organización ha estado al pie del cañón y no ha suspendido ninguno de sus recursos de atención social”. En este sentido, Botí explicó que los servicios más demandados por los afiliados son aquellos que tienen que ver con el entrenamiento sobre tareas de la vida diaria, como pueden ser la higiene personal, cocinar, manejar dinero, planchar o maquillarse, así como el aprendizaje de todas aquellas técnicas para orientarse y moverse con libertad.

El entrenamiento en tareas diarias y en técnicas de movilidad autónoma son los recursos más solicitados

En este camino hacia la autonomía, la nueva aula en el edificio de la ONCE en Lleida facilitará aquellos recursos para que las personas con discapacidad visual puedan escribir, leer un libro, las etiquetas de los precios o el rótulo de una calle. Por su parte, el director de la ONCE en Lleida, Marcelino Cid, hizo hincapié en el esfuerzo de los vendedores quienes, desde que empezó la pandemia, han estado afectados por dos Expedientes de Regulación Temporal del Empleo.

Al acto también asistieron el alcalde, Miquel Pueyo, quien agradeció la importante labor de la organización, y la concejala Mariama Sall. 

Detección y apoyo para menores e inmigrantes con afección severa

En las comarcas leridanas hay un total de 557 afiliados a la ONCE y, a día de hoy, la afección visual mayoritaria es la degeneración macular asociada a la edad (DMAE). A través de unas gafas especiales, el alcalde, Miquel Pueyo, pudo experimentar ayer por unos minutos qué sienten quienes sufren esta enfermedad degenerativa de la retina que afecta el área de visión central.

De la mano de la técnica de rehabilitación Mayka Cruz, tuvo acceso a algunas de las ayudas ópticas y electro-ópticas que están disponibles en elaula de rehabilitación visual, en la sede de la avenida del Segre. Este recurso, que también se estrenó recientemente en Vigo, Álava, Guadalajara y Mérida, entró en funcionamiento a finales del mes de marzo.

Más allá de los afiliados, Cruz explicó que el servicio de rehabilitación visual también permitirá la detección de trastornos visuales en menores que todavía no pertenecen a la organización y hará una valoración del grado de deterioro visual de personas inmigrantes que sufran este tipo de afecciones.