Casi la mitad de los suicidios se podrían evitar con inteligencia artificial

Un estudio realizado por el Hospital Parc Taulí de Sabadell ha detectado que el 46% de las personas que se quitan la vida contactan previamente con la asistencia sanitaria primaria.

De las 2.109 personas analizadas entre el 2010 y el 2015 en la demarcación de Barcelona, el 33% murieron durante la semana siguiente y el 58,5% al cabo de un mes.

Según el trabajo, que ha sido publicado en la revista Archives of Suicide Reasearch, los datos médicos de estas personas, mediante técnicas de Inteligencia Artificial, permitirían hacer una detección y gestión más eficiente de los casos de alto riesgo y, de esta manera, evitar muchas muertes localizando y ayudando a estas personas.

El estudio del Hospital Parc Taulí confirma esta tendencia y se rebela que muchas de las personas que se quitaron la vida en Barcelona habían hecho un uso frecuente de los servicios de salud de atención primaria, habían estado derivados a especialistas en salud mental o habían sido de baja laboral durante el año anterior.

Los factores de riesgo que se asocian a un aumento del peligro de muerte por suicidio son tan diversos como autolesiones, intentos anteriores, trastornos psiquiátricos diagnosticados, uso indebido de sustancias, antecedentes familiares, otras patologías, ingreso hospitalario reciente, dolor crónico, pérdida laboral o económica, entre otros.

En este entorno, el doctor Marc Fradera afirma que las observaciones que han hecho confirman que a menudo los pacientes suicidas se ponen en contacto con el sistema sanitario de atención primaria, pero no son detectados como un alto riesgo de suicidio o no se gestionan eficazmente para la prevención. Es por eso que disponer de registros médicos electrónicos con los datos sobre muchos factores de riesgo supondría una oportunidad de intervención clínica con las herramientas adecuadas.