¿Las coordenadas del meridiano de Greenwich que pasa por la AP-2 son incorrectas?

El meridiano de Greenwich es una línea imaginaria que une los polos de la Tierra y toma su nombre de la localidad británica del mismo nombre, situada cerca de Londres. Sirve de meridiano cero para determinar las situaciones de cada lugar de la Tierra y a partir de él se miden las longitudes en notación sexagesimal. El globo terráqueo se dividió en una conferencia internacional celebrada en 1884 en 24 husos paralelos al meridiano de forma que durante las 24 horas del día el sol discurre por cada uno.

En la autopista A-2, entre las localidades de Bujaraloz (Zaragoza) y Peñalba (Huesca), pocos kilómetros antes de entrar en la demarcación de Lleida, un arco señala el punto que coincide con el paso de la línea imaginaria del meridiano. Un usuario de Twitter, sin embargo, señala que las corrdenades podrían estar equivocadas.

Otros tuiteros aventuran que quizás no era posible construir el arco coincidiendo exactamente con el meridiano mientras que algunos tiran de ironía asegurando que en España hacen pasar los meridianos por donde quieren.

La realidad, sin embargo, es que según Google Earth u otras plataformas como SigPac, el arco no se encuentra al punto 0º 00' 00,00'', como tendría que ser, si no que se encuentra desplazado unos 5,3 segundos en el oeste, que traducido en distancia son los 100 metros que señala el tuitero @unpobrebomber

La explicación la descubre @davidmarti, que adjunta el enlace de un artículo que revela los motivos de esta desviación.

Juan Toro, autor del blog de geomática y topografía 'Interés por la Geomática', explica que el desfase se debe al hecho que el sistema de satélites GPS utiliza como meridiano de referencia el IRM (Internacional Reference Meridian), tomó en 1958 como punto de referencia las coordenadas de una estación de observación de satélites situada en Baltimore, en los Estados Unidos.

La diferencia entre los sistemas cartográficos europeo y norteamericano se constató en 1969, pero se descartó la posibilidad de reajustar todo el sistema GPS para eliminar el desfase, afirma el artículo de Toro.