SOLSONA RENUNCIA
“Esperemos que el obispo que llegue nos escuche a todos”
Los motivos concretos de la renuncia “por motivos personales” de Xavier Novell como obispo de Solsona, en una decisión sin precedentes en Catalunya, continuaban ayer sin saberse. La decisión del prelado, de 52 años, ha causado mucha sorpresa y extrañeza. Su marcha también abre nuevos interrogantes entre la diócesis ya que se desconoce quién será su relevo. Por el momento y de manera temporal, será el obispo de Vic, Romà Casanova, quien le sustituirá como administrador apostólico.
El Fòrum Ondara, un colectivo de una veintena de sacerdotes del obispado de carácter progresista, espera no tener las desavenencias que tuvo con Novell y que se eviten las numerosas polémicas que ha protagonizado por sus decisiones o afirmaciones.
Fermí Manteca, párroco de Torà y miembro del colectivo, afirmó ayer a este periódico que “esperemos que el obispo que llegue sea dialogante y escuche a todos los curas y no solo a algunos”. En este sentido, comentó de Novell que “hemos sido críticos con él y hemos estado en desacuerdo en varias ocasiones porque hacía cosas sin consultar, como suprimir los arciprestazgos”.
Así, al nuevo obispo le piden “que se deje aconsejar por todos los curas y sea prudente y comprensivo con la realidad de esta diócesis, con un entorno rural y comunidades pequeñas”.
En cuanto a los motivos de la marcha de Novell, Manteca afirmó que, “aunque nos ha cogido por sorpresa a todos, supongo que hace tiempo que lo debía estar gestionando porque el papa ya la ha aceptado”. Manteca se reunió con última vez con el obispo hace un mes.
De hecho, la última aparición de Novell en una noticia en la web del obispado es del 11 de julio, cuando acudió a una celebración al santuario de Lord, en Sant Llorenç de Morunys..
Novell ha sido el centro de varias polémicas en los más de diez años en el cargo. Dijo, por ejemplo, que el aborto era el “genocidio más grave y terrible de la humanidad”. En 2017, vinculó la homosexualidad con la “ausencia de figura paterna”, lo que provocó que tuviera que salir escoltado de una misa de Tàrrega y Cervera le declarara persona “non grata”. Se mostró partidario de la autodeterminación de Catalunya.
Por otra parte, el lunes la entidad LGTBI La Cugula de Solsona celebró en una “fiesta de despedida”. El colectivo recogió firmas contra los discursos su “homófobos y misóginos”.