Aval judicial al cierre del ocio nocturno, y la mitad de locales de Lleida, sin ayudas

La Justicia dio ayer la razón a la Generalitat y avaló mantener cerrado el ocio nocturno para evitar brotes de Covid, al entender que la patronal no aporta medidas para evitarlos. La decisión cayó como un jarro de agua fría en el sector, cuyos representantes denuncian que la mitad de los locales de Lleida no se pueden acoger a las ayudas del Govern.

El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) rechazó ayer reabrir el ocio nocturno en Catalunya al concluir que la patronal Fecasarm no ha aportado ninguna prueba de su perjuicio económico ni de que las medidas de control de acceso a recintos cerrados tengan la misma “eficacia” que su cierre para contener brotes de la Covid. Además, el tribunal remarca que aunque la incidencia de contagios ahora es menor, “no es un reflejo de una situación de normalidad o de suficiente mejora que justifique la suspensión de otras restricciones”.

La Fecasarm pidió al TSJC que permitiera al sector abrir por lo menos hasta las 03.30 horas, la restauración hasta la 1.00 y reabrir el interior de los locales a clientes con un test de antígenos negativo entre las 24 y las 48 horas previas. El secretario general de la patronal, Joaquim Boadas, afirmó que esta decisión continuará favoreciendo la celebración de botellones y fiestas ilegales. “Sólo quedará el ocio nocturno descontrolado”, dijo, y avanzó que se plantean recurrir esta resolución.

El responsable del ocio nocturno de la Federación de Hostelería de Lleida, Santi Salvador, destacó que “tras 19 meses cerrados, luchamos para sobrevivir económicamente” y que “aunque el Govern da ayudas, que son insuficientes, la mitad de los 60 locales de Lleida no pueden optar a ellas porque no están al día en sus pagos a Hacienda y la Seguridad Social, ya que no fue hasta enero cuando llegaron las primeras ayudas y entonces muchos ya tenían deudas”. Recordó que “el 25% de establecimientos ya no podrán reabrir” y tildó de “surrealista” el cierre “cuando solo hemos abierto tres semanas y parece que la culpa de los brotes sea nuestra”. En este sentido, confió que en las próximas semanas puedan reabrir “pero coincidirá con las fiestas de Lleida, Barcelona y Tarragona y si hay más contagios, la culpa será nuestra”. Por su lado, uno de los responsables del grupo de ocio Bönobo, Xavi Bosch, consideró “preocupante” que los criterios para levantar el toque de queda “no sirvan para el ocio nocturno” y que “después de ver el descontrol en Alpicat o en otros municipios, no entendemos que sigamos cerrados.”

Mientras, José Antonio Hidalgo, responsable de la discoteca Lit de Pardinyes, manifestó que “si este cierre se mantiene mucho más es la ruina” y que “parece que Catalunya quiera acabar con el ocio nocturno”. Destacó que el sector sí está abierto en otras comunidades. Hidalgo indicó que prevén reabrir el local como bar y explicó que “teníamos 21 trabajadores, pero para el bar, bastará con cuatro o cinco”. Por su parte, el alcalde Lleida, Miquel Pueyo, dijo que algunos municipios harán una propuesta al Govern para evitar episodios de aglomeraciones en la calle.

Por último, la secretaría general de Salud, Meritxell Masó, recordó todavía hay un importante número de personas ingresadas en la UCI, pero que trabajarán para poder facilitar la apertura “lo antes posible”.