HISTORIA EFEMÉRIDE
El Aplec que acabó en naufragio
Ayer se cumplieron 100 años de la tragedia que segó la vida de 33 personas que regresaban a los pueblos de la otra margen del Segre tras participar en la fiesta de la Mare de Déu de Butsènit || La barca que cruzaba el río volcó por exceso de carga al querer subir en ella decenas de personas
Treinta y tres muertos, la gran mayoría de entre 13 y 25 años. Este fue el trágico balance del naufragio de la barca que cruzaba el río Segre a la altura de Butsènit el 11 de septiembre de 1921, hace cien años. Anochecía cuando decenas de vecinos de los pueblos de la otra margen del río que habían participado en el Aplec de Butsènit subieron a la embarcación, a pesar de que el barquero, Ramon Forcat Domingo, gritaba “pareu, pareu, prou, prou, que bolcarem!”.
Por desgracia, no le hicieron caso y unas setenta personas, el doble de su capacidad, permanecieron a bordo. Forcat pidió que bajara gente y se negó a empezar la travesía, pero unos jóvenes empujaron la barca hacia dentro del río a la vez que intentaban encaramarse a ella. “Entre el gentío de la barca y el contrapeso de los jóvenes que querían subir, no demasiado lejos de la orilla, volcó. Unos gritos aterradores y todos cayeron al agua, volviendo la barca a su posición normal vacía de gente”. Así relata el origen de la tragedia Carmel Farré Farré, de Cal Ton Petit de Montoliu de Lleida -que a lo largo de años ha ido recopilando información sobre este suceso- en una edición de “Lo Butlletí” de la Associació Cultural Àgora de Albatàrrec dedicado a esta efeméride.
Jordi Cebolla, miembro de la junta de esta entidad, explica que con motivo de este centenario han impulsado una exposición itinerante para constatar la relación entre los habitantes del Baix Segre y el río, recoger información sobre este accidente y organizar actividades y recabar datos sobre la vida en el Baix Segre a principios del siglo XX.
Sudanell, con 15 vecinos fallecidos, y Montoliu, con 10, fueron los pueblos más afectados por el siniestro
Tanto Cebolla como Josep Ramon Mòdol, teniente de alcalde de Montoliu, señalan que la memoria de esta tragedia se mantiene viva en los pueblos afectados. Fue muy cruel para Sudanell, al ser 15 de los fallecidos de esta población, que tenía 841 habitantes, y con Montoliu, ya que perdieron la vida 10 de sus 537 vecinos. Y para algunas familias, más que cruel.
Fue el caso de la pareja Casals-Bresolí de Montoliu: el hombre salvó a su mujer, pero sus dos hijos, de 14 y 17 años, perecieron. También hubo héroes, como Carmel Mòdol, Josep Aubach, Pere Cardet o Francisco Salvador, que salvaron a varias personas.
Esa misma noche, el juez ordenó encarcelar al barquero, pero al cabo de dos días quedó en libertad después de que los testigos declararan que él se había negado a iniciar la travesía y que pidió a la gente que bajara.
Al parecer, Ramon Forcat, muy afectado, dejó de hacer de barquero, y este siniestro fue el principio del final de este paso de barca. El Aplec fue recuperando asistencia, pero en los pueblos de la otra orilla, a los que iban les decían “no subáis a la barca”, relata Carmel Farré.
“La de Butsènit era la ermita de referencia de los pueblos de la zona y el Aplec era una fiestaza” detalla Cebolla. “Recordamos la tragedia gracias a que nuestros abuelos nos la explicaron”, afirma la presidenta vecinal de Butsènit, Mireia Valls, que añade que “cada año, en el día de la Mare de Déu de Butsènit hacemos una ofrenda floral en el monumento”. Y es que no quieren que la tragedia quede en el olvido.
En este sentido, el vecino de Butsènit Joan Antoni Boldú se muestra taxativo. “Habría que explicar en los colegios esta y otras tragedias como el accidente ferroviario en Juneda en 1988, o el bombardeo del Liceu Escolar en 1937”. Su sobrina conoce lo sucedido porque se lo explicaron en el colegio, pero a Boldú, de 69 años, le da la sensación de que los jóvenes de la partida apenas saben qué pasó.
“Los que tenemos una edad sí que lo recordamos y lo hablamos, ya que nuestros padres o abuelos lo vivieron”, indica. En su caso, su madre tenía 7 años cuando ocurrió. “Fue una hecatombe y todos los vecinos fueron a ayudar a las víctimas”, destaca. Boldú confía en que este centenario “sirva para revivir y no olvidar la historia”.
Homenaje y ofrenda floral hoy junto a la ermita
La partida de Butsènit ha celebrado hoy a las 11.00 horas un homenaje y una ofrenda floral en el monumento. Han asistido alcaldes de los diferentes municipios vinculados a esta tragedia. Previamente, a las 10.00 se inaugura la exposición “El Segre: la memòria d’un riu” organizada por la Associació Àgora y que en los últimos meses ha recorrido los municipios del Baix Segre. Por su parte, el ayuntamiento de Montoliu prevé en los próximos meses grabar los nombres de sus 10 vecinos fallecidos en un relieve escultórico.