Cómo hacer la compra cuando estás a dieta

Comprar bien es el primer paso para lograr una mejor alimentación. Se aconseja elaborar una lista cerrada con lo que debes comprar, hacer la compra con el estómago lleno y leer la lista de ingredientes de los productos.

Pero además, si estás a dieta, tu compra debe contar con: 

Productos frescos: Son fundamentales en una dieta completa y equilibrada. Vegetales, pescado, carne, huevos… El pescado o la verdura congelada son una opción igualmente válida.

Frutas y verduras de temporada: Están en su mejor momento y presentan la mejor relación calidad/precio.

Alimentos integrales: Incrementar el consumo de fibra te ayudará a luchar contra el estreñimiento. Además de las frutas y hortalizas, debes consumir cereales integrales, así que elige pan, arroz o pasta integral.

Frutos secos: Almendras, nueces, avellanas… frutos secos naturales (no fritos, tostados o salados) son una buena opción para los tentempiés de media mañana, fuente de nutrientes básicos para nuestro organismo y saciante. Pero eso sí: no hay que pasar de los 30 g diarios.

Especias, hierbas aromáticas… te ayudaran a variar tu dieta, descubrir nuevos sabores, potenciar el gusto de las preparaciones más sencillas y, muy importante, a reducir la sal.  

Por otro lado, hay algunos productos de los que más vale olvidarse si queremos adelgazar:

Platos preparados: Suelen ser bombas calóricas que te aportan muchas grasas y a menudo nutrientes de baja calidad. Olvídate de las salsas, que suelen ser ricas en sal y grasas saturadas. Lo mismo sucede con la bollería, dulces y postres industriales.

Refrescos con azúcar: Las versiones light de estas bebidas no aportan calorías, pero su lista de aditivos es más larga, por lo que es mejor optar por mejor zumos naturales, agua, una infusión... Y, por supuesto, olvídate de las bebidas alcohólicas, que solo aportan calorías vacías. 

Alimentos light: Algunos alimentos light, aun teniendo un 30% menos de calorías que el original, siguen teniendo muchas calorías. Con este tipo de productos, la tentación de comer más con la excusa de que son light es un riesgo.