SALUD
La micropigmentación de la aréola-pezón posterior a un proceso oncológico se extiende por toda Catalunya
Durante el primero trimestres del 2021 se ha convocado unas 46.2000 mujeres en el mes a hacer una prueba de detección precoz
El Departament de Salut implementa por toda Catalunya la prestación de micropigmentación del complejo aréola-pezón 3D, última fase de las reconstrucciones mamarias a pacientes oncológicas. Actualmente hay 11 hospitales que ofrecen el procedimiento, y está previsto que en dos años sean 15.
En Catalunya, el cáncer de mama es el más frecuente en las mujeres. Se estima que el año 2020 se diagnosticaron 4.626 casos nuevos, un 28% de todos los detectados. La supervivencia de las pacientes diagnosticadas de cáncer de mama a los 5 años es de un 84%. En cuanto a las intervenciones oncológicas, cada año se hacen cerca de 5.000, de las cuales 1.500 pueden requerir mastectomías y, de estas, hasta unas 900 la micropigmentación terapéutica del pezón.
Salut considera "clave" la micropigmentación para la recuperación de las pacientes, porque "contribuye a la mejora de la autoestima, la autoimagen y la calidad de vida" y las ayuda a recuperar la confianza en ellas mismas.La micropigmentación del complejo aréola-pezón es el punto final de la reconstrucción mamaria y se recrea el efecto óptico tridimensional de proyección de esta parte del cuerpo. Se aplica a todas las mujeres con neoplasia de mama en las cuales se proactiva una mastectomía y una oncoplàstia mamaria que afecta a la zona del pezón y la aréola.
El procedimiento lo tiene que autorizar el profesional médico encargado del tratamiento de reconstrucción, que idealmente tiene que estar vinculado a la unidad funcional de mama y tiene que pertenecer al servicio de cirugía plástica, según indican desde el Departament. La prestación se hace desde enfermería de la unidad de mama y está vinculado al servicio de plástica.
Por otra parte, Salud informa de que el primer trimestre del 2021 el programa de detección precoz de cáncer de mama de Catalunya ha "consolidado" la recuperación de la actividad y ha "superado" el impacto de la pandemia. El primer trimestre del año se ha convocado 46.200 mujeres cada mes para participar en pruebas de detección precoz, frente las 42.000 invitaciones mensuales del 2019.
El programa paró las invitaciones a mediados de marzo y hasta mayo del 2020, en la fase inicial y crítica de la pandemia como la mayoría de servicios no urgentes o no relacionados con la atención directa de la covid-19.
A partir de mayo se inició la reanudación gradual de la actividad, que fue general a partir de mediados de septiembre del año pasado, afirma Salud. Está previsto que durante el primer trimestre del 2022 se pueda recuperar totalmente el flujo de la actividad.