PATRIMONIO EQUIPAMIENTOS
La Vall Fosca recupera su Hospital
El martes tuvo lugar la primera reunión del plenario, formado por técnicos y miembros de la administración || La Generalitat propondrá el edificio para ser designado Bé d'Interès Nacional
El Museu Hidroèlectric de Capdella acogió el pasado martes la primera sesión plenaria para dar los primeros pasos en la restauración del Hospital de Cartró de la Vall Fosca, el único documentado del mundo. Para ello, se prevé la participación de una cuarentena de profesionales de distintos ámbitos como la arquitectura, restauradores, arqueólogos y vecinos de la zona que aportarán sus conocimientos con el fin de conservar la singularidad de la construcción, utilizando técnicas de rehabilitación actuales. La reunión contó con la presencia del director del Museu Nacional de la Ciència i la Tècnica de Catalunya, Jaume Perarnau, el alcalde y concejales de la Torre de Capdella, representates del consell comarcal del Pallas Jussà, Idapa y el Geoparc Orígens, el director del Ecomuseu de les Valls d’Àneu, Jordi Abella, el presidente de la asocación Pirineus.watt, Joan Reguant, y representantes del Museu Hidroelèctric de Capdella.
En el encuentro, se tomó la decisión de constitur cinco comisiones de trabajo: la plenaria, la de participación ciudadana, la de investigación, la de conservación preventiva y restauración y la de gestión patrimonial y económica. Perarnau afirmó que “estas comisiones velarán por una restauración sostenible y económica conservando la idea del edificio original”. Por su parte, Reguant destacó que la intervención supone “una actuación sin precedentes y de referencia por su carácter inédito que impulsará la Vall Fosca hacia Europa como un ejemplo comunitario en la construcción prefabricada”, y recordó que la instalación “es un elemento extremadamente frágil, sobre el que no existe ninguna posibilidad de error”.
De este modo, la primera fase del proyecto tiene como objetivo argumentar y ordenar las decisiones y acciones que hacen falta seguir para planificar y actuar de manera responsable sobre un bien patrimonial y arquitectónico probablemente único en el mundo. La restauración del Hospital de Cartró de Capdella es un proyecto encargado por la dirección general de Patrimoni Cultural de la Generalitat y cuenta con el impulso del Museu Nacional de la Ciència i la Tècnica de Catalunya, y está previsto que la Generalitat proponga que el equipamiento sea designado Bé Nacional d’Interès Nacional.
Un proyecto pionero de la arquitectura de inicios del siglo XX
El Hospital de Cartró de Capdella es un edifico efímero impulsado por Energía Eléctrica de Catalunya para atender a los 4.000 trabajadores que construían la central hidroeléctrica de Capdella.
Se trata de un edifico singular debido a los materiales con los que se construyó y a su condición de edificación modular, pensada para poder ser transportada en cajas y montada in situ. Fue construido como hospital en los primeros años de las obras de la central hidroeléctrica de Capdella y en 1912 ya estaba en funcionamiento. El inmueble consta de un entramado de madera de cinco centímetros, en el que hacen de pared unos paneles prefabricados de cartón de dos centímetros de grosor.
El tejado está hecho con los mismos materiales, madera y cartón, cubiertos con tejas de fibrocemento. El hospital contaba con dos alas, separadas por la cocina y los servicios: una destinada a la atención de enfermos y otra dedicada a cirugía.