Consejos para evitar modificaciones no consentidas en la factura de la luz
Consumo duplica la cifra de reclamaciones recibidas contra las compañías eléctricas
La escalada alcista de los precios de la electricidad en el mercado mayorista en los últimos meses ha castigado a los consumidores que mayoritariamente habían elegido seguir con la tarifa en el mercado regulado (PVPC, precio regulado para el pequeño consumidor), hasta hace unos meses con precios más atractivos.
Las medidas adoptadas hasta ahora, como la rebaja del IVA al 10% o la tarificación por franjas horarias, no han impedido que la factura se dispare, y así, si en octubre de 2020, el precio medio de la electricidad alcanzó los 35,56 €/MWh, este pasado mes superó los 204 €/MWh, lo que ha llevado a los consumidores leridanos a, por una parte, revisar los contratos y facturación de sus compañías y, por la otra, a las empresas eléctricas a declarar una “guerra comercial” para intentar captar a estos clientes y llevarlos al mercado libre, con ofertas de tarifas planas o descuentos.
Consejos para evitar modificaciones no consentidas
- Si le hacen una oferta por teléfono o en una visita comercial en su domicilio, no se precipite a la hora de tomar una decisión; pida todas las condiciones de la oferta por escrito y estudie con calma..
- No facilite sus datos bancarios ni datos personales o facturas anteriores si no está seguro y convencido. La compañía de suministro con la que tiene contratado el servicio ya dispone de sus datos, por tanto, no se los pedirá.
- Revise las condiciones del contrato. Puede incluir servicios adicionales que no le interesen, permanencias y penalizaciones si lo cancela antes del plazo previsto..
- Si decide aceptar la oferta, es necesario que posteriormente la confirme por escrito en papel, por correo electrónico, con un mensaje SMS, etc. Para que la contratación sea válida, esta confirmación será realizada por la persona titular del suministro.
- Si contrata por internet, por teléfono o a domicilio, guarde una copia de la oferta y del contrato. Tiene 14 días para anularlo, es lo que se llama derecho de desistimiento y es aplicable en compras fuera de establecimiento comercial.
- En caso de malas prácticas, puede presentar reclamaciones y/o denuncias a la Agencia Catalana del Consumo.
Reclamar la grabación, el contrato por escrito y el derecho de retracto
El consumidor que pueda considerarse “víctima” de esta guerra comercial por los contratos de la luz, tiene derecho, según explican fuentes de Naturgy y Endesa, a desestimar el contrato en los 14 días siguientes a su aceptación, así como a exigir que en 24 horas le remitan la grabación de la llamada telefónica si este ha sido el canal de contratación, y el contrato por escrito si considera que se ha formalizado sin su aceptación o las condiciones no son las ofertadas. En este caso de ‘malas prácticas comerciales’, con 3 reclamaciones en Lleida, la grabación sirve para revertir las altas y bajas del servicio sin coste y, según las compañías consultadas, “puede incluso suponer una penalización para el comercial que puede llevar a la rescisión de su contrato laboral si se verifica que hubo una mala praxis”.