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Lleida clama contra el estigma del VIH

Antisida reclama implementar el Plan Social contra la discriminación y una dotación económica “adecuada” para hacerlo realidad || Lazo humano en la plaza Paeria en el Día de la enfermedad

La plaza Paeria de Lleida fue ayer el epicentro de la celebración del Día Mundial contra el Sida.

La plaza Paeria de Lleida fue ayer el epicentro de la celebración del Día Mundial contra el Sida.MAITE MONNÉ

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Un 56% de los catalanes con VIH han sufrido algún tipo de discriminación por su estado serológico según un estudio del Comitè 1 de Desembre, que revela también que el 90% de los encuestados no denuncia estas situaciones. Coincidiendo con el Día Mundial contra el Sida, usuarios y voluntarios de la Fundació Antisida de Lleida clamaron ayer contra estas desigualdades y el estigma que padecen las personas infectadas con este virus. Y es que según recalcó el presidente de la entidad, Joan Fibla, que durante la lectura del manifiesto en la plaza Paeria exigió de nuevo la implementación de forma definitiva del Plan Social contra el estigma y discriminación de las personas con VIH con una dotación presupuestaria “adecuada” que garantice su cumplimiento, el rechazo social sigue siendo uno de los principales campos de batalla.

En este sentido, recalcó que “a día de hoy tenemos fármacos tremendamente efectivos que permiten que una persona en tratamiento y con carga viral cero no transmite la enfermedad, por lo que puede llevar una vida plena y completa sin ningún tipo de restricciones, ni laborales ni sociales”. En cuanto a los efectos de la pandemia en la actividad de la entidad, además del acompañamiento emocional Antisida reforzó las acciones de apoyo social, con un gran incremento en las ayudas alimentarias y de viviendas. Asimismo, las restricciones de movilidad provocaron un descenso en las pruebas de detección precoz, pasando de unos 500 test al año a 360.

Aun así, Fibla explicó que “las pruebas han permitido detectar en el último año dos nuevos casos de VIH, una cifra que sigue la lenta tendencia descendente de los últimos años”. A pesar de esta reducción paulatina, destacó que “la meta final es conseguir cero infecciones del VIH, pues se trata de una enfermedad muy grave que, si no recibe tratamiento, sigue siendo mortal”. Además del tradicional lazo humano en contra del VIH y el sida, la plaza Paeria fue ayer el escenario de diversas actividades de sensibilización y de recaudación de fondos para mejorar la atención de las personas en riesgo de exclusión social de la demarcación.

Por la noche, edificios de municipios como Lleida y Solsona se tiñeron de rojo para conmemorar el Día Mundial contra el Sida.

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