Adiós a la gran Monica Vitti

La actriz italiana Monica Vitti, conocida por sus papeles cómicos y musa de grandes directores como Mario Monicelli y Michelangelo Antonioni, falleció ayer en Roma a los 90 años de edad. Vitti fue la protagonista de la conocida como Trilogía de la incomunicación” de Antonioni: L’Avventura (1960), La notte (1961) y L’eclisse (1962), y también divirtió al público con cintas como La ragazza con la pistola (1968), de Mario Monicelli; Dramma della gelosa (1970) de Ettore Scola, La cintura di castità (1967) o Amore mio aiutami (1969), de Alberto Sordi, con quien fraguaría una amistad eterna. Maria Luisa Ceciarelli, su verdadero nombre, fue un referente imprescindible para todas las actrices que la sucedieron y cubrió toda la gama de personajes femeninos del cine italiano, como la burguesa, neurótica y afligida por la incomunicabilidad para las películas de Mario Antonioni, pero también la “romana”, enamorada de la vida, de alegría contagiosa en las cintas que la vieron de pareja cinematográfica con otra de las estrellas de cine italiana como Alberto Sordi.En los últimos años, debido a una enfermedad degenerativa, preservó su privacidad, pero conservó un fuerte vínculo con el mundo del cine que festejó en noviembre sus 90 años con exposiciones fotográficas y reseñas de sus más de 50 películas.Vitti, considerada una de las grandes actrices del cine italiano junto con Anna Magnani, Virna Lisi, Gina Lollobrigida o Sophia Loren; ganó cinco Premios David di Donatello, los galardones más importantes de la Academia de cine italiano; así como un Oso de Plata de la Berlinale, el León de Oro honorífico del Festival de Venecia y una Concha de Plata en San Sebastián.“Adiós a Monica Vitti, adiós a la reina del cine italiano.

Hoy es un día realmente triste, desapareció un gran artista y una gran italiana”, escribió en las redes el ministro de Cultura italiano, Dario Franceschini.