Una docena de estudiantes de la Universitat de Lleida podrán hacer prácticas remuneradas en zonas rurales

El Consejo de gobierno de la Universitat de Lleida (UdL) ha aprobado una convocatoria de prácticas académicas -tanto curricular como extracurricular- en zonas rurales con problemas de despoblación. Podrán optar estudiantes de grado y máster oficiales de la UdL que quieran completar su formación en municipios de menos de 5.000 habitantes de cualquier territorio del Estado, donde tendrán que residir durante el periodo de prácticas. En total, serán doce becas, de 1.000 euros brutos mensuales, que se distribuirán preferentemente entre 6 estudiantes de la rama de humanidades y ciencias sociales y jurídicas, y 6 de ciencias de la salud, ingeniería y arquitectura. Por otra parte, el Consejo de gobierno ha aprobado el Plan estratégico de la UdL con el horizonte 2030.

Las prácticas remuneradas en zonas rurales se podrán realizar en ayuntamientos, organismos públicos, asociaciones, cámaras de comercio, entidades sin ánimo de lucro y empresas, entre el 1 de junio y el 31 de octubre, con una duración mínima de tres meses y máxima de cinco.

Esta convocatoria se enmarca en el Programa Campus Rural del Ministerio para la transición ecológica y el reto de demográfico, el Ministerio de Universidades y la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE) que tiene como objetivo potenciar estos territorios entre la juventud "por qué puedan verlo como un lugar|sitio de oportunidades para el desarrollo de su futuro profesional".

Plan estratégico 2030

Por otra parte, el Consejo de gobierno de la UdL ha dado luz verde este miércoles en el nuevo Plan estratégico de la institución, que marcará las líneas de trabajo hasta el 2030 y que tendrá que ser aprobado por el Consejo Social. Abraza cinco ámbitos: docencia, aprendizaje y empleabilidad|ocupabilidad; investigación|búsqueda y transferencia del conocimiento; relación con el territorio e internacionalización; comunidad universitaria y políticas transversales, y organización, recursos y servicios. El documento explica que aunque la crisis de la covid-19 hizo retrasar el inicio del proceso de elaboración del Plan, "ha ayudado a dibujar la estrategia de futuro como organización, pensando en cómo afrontar, resistir o sobrevivir en este nuevo escenario".

El Plan Estratégico 2030 establece siete palancas de cambio: la especialización temática de la docencia en las áreas de agroalimentación, salud, tecnología y sostenibilidad y desarrollo social y territorial; la innovación docente "con una combinación óptima de presencialidad y virtualidad"; la investigación|búsqueda multidisciplinar de impacto; la captación y consolidación del talento; la eficiencia organizativa mejorando la estructura y la gobernanza; la transformación digital "de forma transversal y en sentido amplio, que sustente a un modelo de universidad flexible, ágil y global dirigido a estudiantat de todo el mundo", y la vinculación en el territorio combinada con la proyección internacional.

"Un aspecto destacable es la incorporación de la estrategia digital, que es una de las siete palancas y que ha tenido un desarrollo en paralelo en el del Plan Estratégico, con la definición de objetivos y actuaciones específicas que afectan la comunidad universitaria, el ecosistema TIC y el sistema de información," ha destacado al vicerrector de Política Institucional y Planificación Estratégica de la UdL, Ferran Badia. Este Plan es el resultado de un proceso participativo donde han tomado parte un centenar de personas.

En la sesión de este miércoles, también se han aceptado los recursos presentados contra el acuerdo del Consejo de gobierno del 14 de diciembre de un concurso para el abastecimiento de vacantes de puestos de trabajo de personal laboral de administración y servicios mediante sistema de traslado y reincorporación de excedencias, promoción interna y nuevo ingreso, para cubrir plazas de auxiliar de servicios y punto de información. Ahora manca la aprobación por parte del Consejo Social de la UdL.