Los cambios de la nueva ley de garantía en coches de segunda mano
Los vehículos de segunda mano pasan de seis meses de garantía a un año en el caso de compra a particulares y a dos si es a concesionario.
Imagen de archivo de coches en una explanada listos para su comercialización.
La Ley de Garantía 2022 es una medida que afecta a la compra y venta de vehículos usados, tanto a concesionarios como a particulares y que está en vigor el pasado 1 de enero.
Anteriormente a esta fecha, al comprar un coche usado, el comprador tenía que demostrar vicios ocultos en el vehículo y tan solo tenía 6 meses de garantía entre particulares y 1 año de garantía si realizaba la compra en un concesionario. Ahora y tras la entrada en vigor de la nueva ley para vehículos usados, el vendedor deberá hacerse cargo de cualquier avería que pueda sufrir el vehículo en el plazo que dicta la garantía desde que vende el vehículo, siempre y cuando no se especifique dicha avería en el contrato.
La nueva ley establece un plazo mínimo de 2 años de garantía que se puede acorda entre ambas partes en 1 año, siempre y cuando quede reflejado en el contrato. Sin embargo la protección entre particulares se puede reducir hasta los 6 meses siempre y cuando quede reflejado por ambas partes en el contrato de compra-venta, de no ser así, la garantía entre particulares contempla un mínimo de 1 año.
Los cambios en la ley de garantías no solo afectan a la duración de las mismas, también implican variaciones en su aplicación. Hasta el momento el comprador estaba desamparado ante los denominados como ‘vicios ocultos‘, es decir, los defectos, fallos y averías que el vendedor sabía que tenía el coche, pero de los que no le avisaba. Era el propio comprador el que tenía que demostrar que la falla era previa a la adquisición y que no la había provocado al pasar a su propiedad. Ahora la situación se invierte y será el vendedor el que, durante el periodo de garantía, deberá hacerse cargo de los gastos de la reparación siempre que la avería no estuviera registrada en el contrato.
Esta nueva ley de garantía para vehículos usados podria subir los precios de los vehículos de segunda mano, según los expertos entre un 15% y un 20%. Este incremento se vería reflejado sobre todo en los vehículos de concesionarios cuya garantía es superior a la de particulares.
