Propiedades y beneficios del aceite de coco

El aceite de coco se ha convertido en un imprescindible entre los amantes de la alimentación y salud natural. Un aceite muy interesante que destaca por su agradable sabor dulce y tropical y sus propiedades que lo convierten en un gran aliado en la cocina, como cosmético o como remedio natural. El aceite de coco es de origen vegetal y se extrae de forma natural mediante el prensado de la pulpa del coco.

Tiene un alto contenido en grasas, pero son ácidos grasos de cadena media que se transforman en energía directamente en el hígado sin ser transportados por la sangre y sin generar glucosa en ella (como sí sucede con otros alimentos). Además, estas grasas de cadena media reducen el colesterol, aumentan el metabolismo y ayudan a regular el apetito.

Entre las propiedades de este aceite también destaca la cantidad de ácido láurico que contiene. Un ácido graso que se encuentra presente en la leche materna y que presenta propiedades antibióticas y antibacterianas.

Su proceso de oxidación es bastante lento, por lo que se mantiene a temperatura ambiente, sin estropearse, hasta 6 meses.

Además, el aceite de coco genera muchos menos tóxicos al freír a altas temperaturas en comparación con otros aceites, como el de girasol, maíz o soja.

Beneficios del aceite de coco:

1. Favorece la pérdida de grasa abdominal. Los ácidos grasos del aceite de coco, al ser de cadena media, no quedan tan almacenados en el cuerpo en forma de grasa como sí sucede con los ácidos grasos de cada larga que tienen otro tipo de aceites.

2. Mejora la salud cardiovascular. La grasa abdominal está relacionada con riegos cardiovasculares. Estos riesgos disminuyen si, en vez de tomar tanta cantidad de otro tipo de aceites menos saludables, consumimos un poco de aceite de coco diariamente.

3. Aumenta el metabolismo y produce sensación de saciedad. Esto sucede porque el tipo de grasas del aceite de coco van directamente al hígado, favoreciendo así la quema de grasas.

4. Elimina hongos, bacterias y virus patógenos. Gracias a su gran contenido en ácido láurico, el aceite de coco tiene la capacidad de acabar con hongos, bacterias y virus patógenos de nuestro organismo.

5. Mejora la función cerebral. El aceite de coco genera cuerpos cetónicos que pasan por la sangre, aumentando la energía cerebral de los pacientes con Alzhéimer y disminuyendo así sus síntomas.

Usos en la cocina del aceite de coco

Para freír o cocinar a la plancha, es ideal echar una cucharadita de aceite de coco en la sartén. También es muy útil para la preparación de recetas de repostería. Su agradable sabor dulce, muy similar al de las almendras, también lo hace perfecto para incorporar a recetas de repostería.

Hay que elegir un aceite de coco sin refinar y calificado como BIO, que asegure que se trata de un aceite virgen prensado en frío. El término virgen quiere decir que ese aceite no ha sido procesado, ni refinado. Además, al haber sido prensado en frío, se mantienen intactas sus propiedades.