Una Fira de Titelles 'redonda'

La 33 Fira de Titelles de Lleida cerró ayer tres días de espectáculos con cifras de público anteriores a la pandemia, llegando a los 40.000 espectadores. El coordinador del certamen, Oriol Ferre, hizo un balance “muy positivo” de la que definió como “una Fira tal como la recordábamos”, con plazas y calles llenas de espectadores venidos de todas partes. Ferre también destacó la buena acogida del nuevo escenario del espectáculo inaugural, la Seu Vella, “por su marco incomparable”.

“Nos dejó muy buenas sensaciones a nosotros y al público”, aseguró Ferre, y añadió que tanto los espectadores como los programadores les han transmitido su satisfacción por la calidad y la variedad de espectáculos. Tras dos años de interrupciones y restricciones por la pandemia, la plaza Paeria y el Eix Comercial volvieron a llenarse del encanto de los cuentos protagonizados por marionetas. Un éxito que también se trasladó a las obras de pago que se representaron en las salas interiores, con representaciones que colgaron el cartel de entradas agotadas.

En total, pequeños y mayores pudieron disfrutar de 32 espectáculos de 31 compañías (las leridanas Rauxa, El Sidral y Les Cícliques; 8 catalanas, 14 del resto del Estado y 6 internacionales). De estas obras, veinticuatro se estrenaron en la Fira, como C.U.L de la compañía Escarlata o An-Ki, de la Cia Ortiga, que fueron estrenos absolutos. El broche de oro llegaron ayer de la mano de El Espejo Negro, que deleitó a los asistentes en la Llotja con la historia de la pequeña Cristina, una niña trans que lucha por su derecho de ser la persona que es y se siente.

Al acto asistió el concejal de Cultura, Jaume Rutllant, quien destacó que “ha sido todo un éxito incorporar la Fira a la Seu Vella, tal y como hemos visto la respuesta de la gente. De aquí podemos sacar lecciones positivas en cuanto a la promoción del conjunto monumental tanto para el público de Lleida como el que ha venido des fuera”. En esta misma línea, el director del Consorci del Turó de la Seu Vella, Joan Baigol, también valoró de forma positiva que la organización haya decidido incorporar el monumento como escenario de la Fira y explicó que esta posibilidad se había planteado en otras ocasiones, pero sin éxito, desde el mismo organismo que dirige.